Reforma hacendaria, reto de los fiscalistas

Carlos Bautista Sánchez tomó protesta como presidente del cuarto consejo directivo 2020-2021 de la Asociación de Fiscalistas de Estado de Querétaro

Alejandro Payán | Diario de Querétaro

  · sábado 11 de enero de 2020

Foto: Cortesía | Gobierno del Estado de Querétaro

Carlos Bautista Sánchez tomó protesta como presidente del cuarto consejo directivo 2020-2021 de la Asociación de Fiscalistas de Estado de Querétaro (AFEQ) donde destacó que el principal reto será el trabajo en reforma hacendaria para los queretanos.

“De entrada buscamos fortalecer la cultura tributaria en nuestro estado, sabemos que en este momento hay una coyuntura importante a nivel nacional, la cuestión fiscal cada vez es más trascendente porque el gobierno de repente establece medidas coercitivas bastante agresivas y lo que procuramos nosotros es que el empresario esté tranquilo, cumpla con sus obligaciones y pueda ejercer su negocio como como lo tiene programado desde un inicio”.

Actualmente hay más de 100 afiliados, aunque entre 150 y 200 acuden a las conferencias y capacitaciones que realizan en materia fiscal, principalmente de cara a las reformas que entraron en vigor este año.

“Lo más importante es que el fiscalista esté preparado, conozca las novedades, la nueva regulación, a partir de enero tenemos una reforma penal-fiscal bastante agresiva, muy fuerte, esa reforma implica que todos estemos ya enterados y en este momento implica que todos estemos ya enterados e implica que estemos ejerciendo con base en las nuevas reglas que nos está poniendo el gobierno”.

Destacó lados positivos como la lucha frontal contra operaciones simuladas, la venta y compra de facturas, mientras que por otro lado es que la redacción de la ley quedó tan ambigua y abierta que muchos empresarios, aunque cumplan con sus obligaciones de manera correcta, pudieran caer en los supuestos que marca la ley.

“Hay algunas cuestiones en el Código Fiscal de la Federación, específicamente, en donde la facultad que tiene la autoridad para recaracterizar una operación en función de beneficios económicos o fiscales es muy peligrosa porque estamos ante el posible arbitrio de la autoridad”, finalizó.