Justicia por elección fracasa: exmagistrado

Julio César Vázquez Mellado, señaló que la “mal llamada reforma judicial” es un atropello a los derechos humanos de todas las personas

Karen Munguía / Diario de Querétaro

  · martes 20 de agosto de 2024

Foto: Hugo Arciniega / Diario de Querétaro

La elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular está destinado al fracaso, como ocurrió en Bolivia, advirtió, Julio César Vázquez Mellado, magistrado en retiro del Poder Judicial de la Federación en Querétaro, quien se sumó a la protesta de trabajadores en la entidad.

El magistrado en retiro señaló que solo en Bolivia existe la elección de magistrados y ha fracasado, pues los votos nulos han sido mayores en diversas elecciones desde 2011, cuando se dio la primera votación.

“No existe en el país, no existe en el mundo, solo el país de Bolivia tiene este tipo de experiencias y han sido fracasadas, han sido un verdadero fracaso”, dijo.

Señaló que la “mal llamada reforma judicial” es un atropello a los derechos humanos de todas las personas, y externó que la intervención en el Poder Judicial ocasiona que las personas se expongan a la arbitrariedad y exclusión de derechos fundamentales, como son los familiares y patrimoniales.

“La pretendida mal llamada reforma judicial en realidad es un atropello para el Poder Judicial de la Federación, y es un atropello sobre todo a los derechos humanos de todos los mexicanos, porque el único defensor de los derechos humanos es el Poder Judicial de la Federación”, dijo.

Consideró que todos los mexicanos deberían estar en contra de la reforma judicial e insistió en que elección de jueces es un “verdadero despropósito”, pues se tienen que garantizar que existe conocimiento, estudios y experiencia para poder desempeñar un cargo como persona juzgadora; al respecto, puso como ejemplo a un médico, al cuestionar si a la ciudadanía le gustaría elegir a un doctor por voto popular.

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Abundó que ante la intervención en el Poder Judicial no habría quien defienda al pueblo frente a la arbitrariedad, contra una ley injusta, la libertad de personas o la pérdida de una propiedad o de la patria potestad de un hijo.

“Si lo quitan, si lo obstruyen, es para que el Ejecutivo haga lo que quiera, para que no haya una verdadera democracia, si no que estaríamos entrando en un país lamentablemente despótico, lamentablemente dictatorial”, apuntó.