QUERÉTARO, Qro.- (OEM-Informex).- Si bien las relaciones de pareja en el mismo centro de trabajo siempre han sido un tema controversial que depende de la política de cada empresa, para el presidente del Colegio de Psicólogos del estado de Querétaro, Juan Carlos García Ramos, este vínculo no necesariamente tiene impactos negativos en la productividad.
Cuando una relación de pareja –dice- se da en condiciones estables y armoniosas, el nivel de satisfacción es mayor lo que se refleja en el desempeño diario. Situación contraria cuando la relación es ocasional o disfuncional que termina por incidir en el desempeño de los empleados.
MÁS TIEMPO EN EL TRABAJO
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en México se trabajan más de 2 mil 225 horas al año por persona, el nivel más alto a nivel mundial; por lo que es probable que los trabajadores pasen más tiempo con sus colegas que con sus amigos, familiares o incluso con sus cónyuges. Por eso no resulta sorprendente que muchos formen vínculos estrechos y a veces románticos.
“Estas relaciones de parejas estables o en su caso ocasionales y que se suscitan en un mismo ambiente de trabajo están sujetas a la ambivalencia que puede tener la expresión de la afectividad y amoricidad”.
Explicó que como en todo escenario el amor es complicado y difícil, la relación entre parejas no es sencilla y estar en este escenario tan cercano de la oficina puede traer algunas complicaciones.
“Tienen que ver con la influencia que pueden tener los compañeros de trabajo, rivalidades, celos y comentarios que pueden surgir en un momento dado y que deriva en demandas o exigencias de atención por parte de uno de los integrantes de la pareja, afectando el tiempo de responsabilidades que pueda destinar a su trabajo.
PROHÍBEN PAREJAS
En este tema Total Jobs, refiere que el 22% de las personas conocen a su pareja en el trabajo, por lo que cuando empieza a surgir la atracción entre los compañeros, puede generar cierta incertidumbre en la empresa y para evitar situaciones incómodas o dar pie a complicaciones en el ambiente laboral, muchas compañías han optado por prohibir este tipo de comportamientos entre los colaboradores; es decir, en las políticas internas o en el código de conducta se establece que mantener una relación romántica con compañeros de trabajo no está permitido.
Para el profesionista de la psicología este tema no deja de ser una situación que quizá sea cuestionable y en su opinión lo complicado es un tema de ética en estas relaciones laborales, porque muchas veces son de jerarquías diferentes y esto puede entenderse como una situación de acoso o bien un conflicto de intereses.
ÉTICA LABORAL
Refirió que la ética en muchos espacios laborales señala que no está permitido y que no es recomendable establecer relaciones amorosas o sexuales con personas con un rango mayor o menor por cuestiones de riesgo laboral en términos de la jerarquía.
Recordó que una relación sentimental en el centro de trabajo es responsabilidad de cada persona y cada quien tiene que valorar los riesgos naturales que implica este vínculo y no solo riesgos sino el compromiso y la obligación de mantener.
Cabe mencionar que diversos especialistas en relaciones humanas coinciden que la productividad laboral mejora ya que, al estar en una relación amorosa, se intenta impresionar a la otra persona y cuando la pareja comparte el espacio de trabajo, lo hace para demostrar sus excelentes habilidades laborales.
PROS Y CONTRAS
Algunos expertos también señalan que las relaciones románticas entre colaboradores pueden tener impactos positivos como negativos en las empresas; los primeros, por ejemplo, pueden hacer que las personas se sientan más conectados con la compañía, lo que en general aumenta los niveles de retención de empleados.
Al mismo tiempo, las relaciones ayudan a que los empleados quieran venir al trabajo y se reduzcan los días por enfermedad, y permite al equipo trabajar más rápido.
Además de que, cuando los empleados que trabajan directamente juntos están en una relación son generalmente más productivos. Sin embargo, cuando una relación romántica no dura, esa productividad queda en la nada y se vuelve más difícil evitar a la otra persona, lo que generalmente termina en un reemplazo de personal.
En una encuesta realizada por el portal de empleo Trabajando.com entre mexicanos, 84% afirmó que no tiene una relación amorosa y que jamás tendría un romance en la oficina; mientras que 7% no la tiene, pero no le importaría tenerla; y el 6% sí la tiene y aún continúa el romance.
Según la encuesta del portal, en 64% de las empresas no está permitido tener pareja en el centro de trabajo; 13% de los trabajadores no sabe cuál es la política de su empleador y 13% dice que sí está permitido.