En Querétaro, la mayoría de los productos tradicionales y artesanales alusivos al Día de Muertos son realizados por familias y manos locales, entre cartoneras localizadas en El Marqués hasta dulceros de El Tepetate, en la capital, donde hay un marcado trabajo en este ámbito que busca resistir la llegada de productos provenientes de otros estados y, principalmente, de origen chino.
Durante el mes de octubre y los primeros días de noviembre, los productos relacionados al Día de Muertos, como calaveritas de azúcar, figuras de barro, madera, palma y figuras de papel maché, son requeridos por la ciudadanía local que busca adornar sus hogares o su altar en honor a sus muertos.
Es por ello que en el Centro Histórico decenas de locales ambulantes y establecidos comienzan con la venta de estos, en espacios públicos como el Jardín Guerrero o en calles como en Madero, a un costado del Jardín Zenea ante la visita de cientos de familias durante el día.
"Nosotros somo la familia Martínez Rico y venimos de El Marqués, allá de El Rosario, y vendemos los diablitos de papel maché. Mi hijo y mi esposo recolectan todo el cartón y periódico posibles y de ahí preparamos el resistol con su agua y le damos forma", explicó doña Jetsabé, quien lleva 30 años en el giro.
Para ella y su familia estas fechas son las de mayor venta para este negocio, que no siendo el único en el que trabajan, sí es el que les permite en estas fechas lidiar con los gastos de diciembre y la llamada cuesta de enero, quien se dijo orgullosamente queretana.
Asimismo, del barrio de La Otra Banda, Ramiro González es dulcero al igual que su padre, originario de El Tepetate, donde él mismo realiza las calaveritas de dulce y chocolate que suele vender en el Centro Histórico, una tradición que ha seguido en el ámbito de las golosinas y que aprovecha en estas fechas para aumentar sus ventas.
"Nosotros somos queretanos 100%. Preparo dulces desde joven; yo trabajaba en la herrería, pero mi abuelo era dulcero. Preparaba buñuelos, papas, caramelo, dulces tradicionales mexicanos y me heredó su enseñanza. Yo sigo en esto y me gusta", explicó.
Las artesanías y productos queretanos aún persisten en el comercio local, más allá de la invasión de productos chinos, norteamericanos o de otros estados, que si bien hacen presencia en la entidad, no opacan el trabajo que se realiza en Querétaro, pues aún muchas familias siguen la tradición de sus padres, sobre todo en fechas como esta.