Histórico, el Tribunal Unitario Agrario del estado resolvió un caso que inició en 1960 y 59 años más tarde, con acuerdos entre los ejidatarios de Palomas y Galindo pertenecientes a San Juan del Río se logró el mutuo acuerdo para su resolución a beneficio de casi 200 ejidatarios entre las partes.
El representante legal desde hace 12 años del Ejido Galindo, Gildardo Pérez Islas compartió que originalmente el conflicto inició por una permuta de tierras, detalló que en año 60, derivado de que posesionarios del Ejido Palomas estaban dentro de terrenos certificados a favor del otro ejido en comento, la autoridad pretendió resolver mediante dicha permuta.
Misma que en su momento requerían de ciertas formalidades que no se cumplieron, que, al no resolverse, se generó la controversia jurídica a través de un juicio de amparo que incluso llegó a la suprema corte de justicia que a su vez turno el expediente a los tribunales agrarios, que después de recursos de litigio auténtico en materia agraria en este año se resolvió.
“Se logró a través de la exhortación a llegar a una amigable solución, es una forma de resolver los conflictos agrarios, a través de la conciliación en donde las partes, sin ningún tipo de presión e intervención del estado, libremente determinan como llegar a la resolución de su conflicto y el magistrado Salvador Pérez González felicitó a los dos núcleos de población por llegar al acuerdo conciliatorio”.
Gildardo Pérez resaltó que es relevante y trascendente para el estado la resolución de este caso que ahora se da certeza jurídica a propietarios de 205 hectáreas porque abre brecha a una nueva posibilidad de que las partes, núcleos agrarios, lleguen a la resolución de sus propios conflictos a través de la línea de la conciliación.
“Son tierras de buena calidad, fértiles, que reciben riego, en donde 54 familias se están viendo beneficiadas con la certeza jurídica de tener un certificado parcelario, un documento que acredite su posesión y por la parte de Galindo recibe 44 hectáreas de riego de una superficie de 451 hectáreas de cerril, son las superficies involucradas en este proceso de la permuta”.
A decir del representante del Ejido Palomas, Bernardo Ramírez compartió que el caso nunca lo vio como conflicto, sino es deslinde de tierras que el Ejido de Galindo tenía en posesión, pero que, gracias a la voluntad de los compañeros de este ejido junto con el esfuerzo de las autoridades correspondientes, se logró el acuerdo pacífico sin violencia ni hechos que lamentar.
Mientras que el comisario ejidal de Galindo, Marcelo Morales Feregrino calificó la resolución del caso como una gran negociación, ya que se habían tocado muchas puertas y reconoció que con el ejido Palomas tienen muy buena relación vecinal y de amistad.
“Como comisariado me da mucho gusto de que se haya llegado a un arreglo pacífico, no hubo gran conflicto de problemas de matazones y esto que estamos haciendo nosotros que ya está por salir la sentencia y lo digo con mucho orgullo por parte de Galindo y que los 54 posesionarios de Palomas tengan su título parcelario”