Dieciocho perros fueron sometidos a eutanasia tras ser rescatados de condiciones de insalubridad y hacinamiento en un refugio clandestino conocido como "Kikas Life", ubicado en la colonia San Pedrito Peñuelas, en Querétaro; lo anterior, derivado de la denuncia de maltrato animal el pasado 19 de febrero de 2024.
De acuerdo con la Dirección de Protección, Cuidado y Control Animal del Municipio de Querétaro, el deterioro físico y las enfermedades de los animales hicieron inevitable la decisión, pese a los esfuerzos por garantizar su bienestar.
De los 80 perros asegurados en este caso, 32 encontraron un nuevo hogar mediante adopciones y hogares temporales, mientras que 30 fueron entregados a asociaciones protectoras de animales.
De acuerdo con el reporte de la dependencia municipal, la intervención inició tras una denuncia ciudadana, que alertó sobre las condiciones deplorables en las que vivían los animales, así como el abandono prolongado por parte de la responsable del lugar.
Personal de la Dirección de Protección Animal inspeccionó el domicilio ubicado en calle Choferes #73, corroborando las condiciones de hacinamiento, insalubridad y desnutrición de los perros. Con apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, la encargada del refugio, Jimena Refugio Reséndiz Tovar, fue remitida a los Juzgados Cívicos por violaciones al Reglamento de Protección Animal.
El caso evidenció la importancia de cumplir con los requisitos legales para operar refugios de animales en Querétaro. La legislación exige instalaciones adecuadas, personal especializado y un registro de los animales bajo su cuidado, además de permisos oficiales otorgados por las autoridades competentes.
En el municipio de Querétaro, solo nueve asociaciones cumplen con los lineamientos establecidos por la Ley de Protección Animal del Estado, según el registro disponible en la página oficial del municipio. Estas normativas garantizan la seguridad, higiene y bienestar de los animales, evitando situaciones de maltrato como la de "Kikas Life".
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Para operar un refugio, también es necesario estar inscrito en el padrón de establecimientos comerciales, contar con un representante legal y registrar la propiedad del lugar. Sin estas medidas, los refugios pueden convertirse en focos de maltrato, en lugar de cumplir su propósito de protección animal.
El municipio de Querétaro ha reforzado sus políticas de protección animal, recordando a la ciudadanía que puede reportar casos de maltrato a través de la Dirección de Bienestar y Sustentabilidad Animal. Estas acciones buscan prevenir futuros casos y garantizar que los refugios cumplan con su función de manera responsable y ética.
