"A San Juditas yo le debo mi vida", explica Mauro, habitante de La Cañada, un fiel seguidor de este santo desde hace 20 años, cuando decidió dejar de consumir alcohol y algunas drogas que lo hundieron hasta perder a su familia y ser abandonado.
Mauro, como otras tantas personas, se refugia en la creencia del patrono de las causas difíciles y cada 28 de octubre, como manda, se hace presente en la capilla en su honor, en la comunidad de La Noria, caminando de su casa hasta este sitio en la lateral de la Querétaro-México.
"Yo tuve una vida difícil. Antes era alcohólico y le entraba a la mona, pero ahora ya no soy nada de eso. Tengo 20 años que no lo soy. Mi esposa me dejó en ese entonces y se llevó a mis hijas. Ahí andan en la misma colonia, desde siempre, pero ellas por su cuenta. Yo tuve que pedir dejar de tomar, juré a San Juditas y aquí ando pagando, como se debe".
Como Mauro miles de personas vienen por una razón personal, alguna petición o favor otorgado que ha hecho de este santo uno de los que más devotos tiene, sólo después de la Virgen de Guadalupe.
Tal como Maricarmen, de El Colorado, quien encontró en San Judas un refugio al otorgarle el milagro de salvar a su hijo de 5 años de edad de una enfermedad en el estómago que pudo ocasionar su muerte. Le regalaron una figura de San Judas, la cual lleva a bendecir este 28 de octubre.
"Yo venía bien mal por mi hijo. Que casi se me muere y le pedí a San Juditas que me ayudara. Mi cuñada me regaló una figurita y me dijo que le pidiera por mi niño y sí, se recuperó y desde entonces yo le estoy muy agradecida que vengo aquí a darle su oración, a estar con él".
Desde entonces su familia forma parte de los festejos anuales de El Colorado, desde el 27 con los rezos y la posterior fiesta grande, donde se conjugan con los vecinos para dar cada quien mole, refrescos, algún mariachi y hasta fuegos artificiales, una de las zonas donde mayor fe hacia este santo existe en Querétaro.
Son miles de seguidores de San Judas Tadeo que se dejan ver en grandes multitudes los días 28 de octubre; personas con una historia detrás, provenientes de Corregidora, El Marqués, Pedro Escobedo, San Juan del Río, Querétaro, quienes recorren grandes distancias solo para dar una oración para volver el siguiente año.