- Cada panteón tiene entre 200 y 500 lugares
- Todos los fallecidos por Covid-19 son cremados
De los siete panteones del municipio de El Marqués, cinco están llenos, y solo dos cuentan con espacios para los fallecidos, lo cual no está relacionado con las defunciones por Covid-19, ya que todos los fallecidos se tienen que cremar, afirmó el secretario de Servicios Públicos municipales, Mauro Aragón Chávez.
Explicó que solo en los panteones en los que están libres para enterrar a los difuntos son en San Miguel Amazcala y Tierra Blanca, aunque en el primer espacio solo está destinado para las comunidades de El Lobo, Alfajayucan, y San Miguel Amazcala, por acuerdo con los ejidatarios que donaron este espacio.
“De los siete ya están saturados, solo se utiliza inhumación y exhumación”, indicó.
Señaló que ante este panorama están en el proceso de adaptar un nuevo panteón que también estará en la comunidad de San Miguel Amazcala, y que contará con un espacio de 4 hectáreas, en los que aún falta terminar protocolos de sanidad y sanitización.
Además, indicó que a finales de este año también estará habilitado el panteón que está en La Cañada, solo esperan que la Comisión Estatal del Agua (CEA) otorgue ese servicio.
Enfatizó que todos los fallecidos a causa de Covid-19 son cremados y depositados en urnas por lo que no generaron el incremento, mientras que por inhumación se registran entre tres y cinco personas cada mes en esa demarcación.
“Por supuesto siempre checando los protocolos de seguridad pública y de Querétaro que no se entierren caso de Covid-19”, subrayó.
Cada uno de los siete panteones municipales tienen entre 200 y 500 lugares para difuntos.
Recalcó que este 1 y 2 de noviembre tendrían vigilancia para darle información a la población sobre que los panteones permanecerán cerrados para evitar conglomeraciones ante la pandemia de Covid-19.