Alejandro Esparza se manifestó la mañana de este jueves afuera del edificio del Centro Cívico de Querétaro, simulando sacrificarse en una cruz de madera que colocó sobre el asfalto del lugar.
Se pronunció en contra de los permisos que presuntamente está dando el Municipio de Querétaro en la reserva ecológica de El Cimatario, para que “los poderosos” construyan sus casas. El señor permaneció en el lugar dos horas y se retiró.
Alejandro Esparza dijo ser ecologista que cuida las 24 horas esa zona ecológica. Durante su estancia se le acercaron policía municipales, para ofrecerle apoyo.
Afuera del Centro Cívico de Querétaro, además permanece en plantón desde hace ocho meses, la señora Rosa Rojas Olguín, trabajadora jubilada de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, en protesta porque desde hace seis años no le han nivelado el salario que cobra por su pensión.
Ella, junto a su padre el señor Alejandro Rojas Arrazola, condicionaron afuera del Centro Cívico una casa de campaña con cartones, lonas y tablas.