Monseñor Faustino Armendáriz Jiménez continuará al frente de la Diócesis de Querétaro, por lo menos hasta el 21 de noviembre cuando asuma su nuevo encargo como arzobispo de la Diócesis de Durango, entonces la diócesis queretana será nombrada sede vacante.
El vicario general de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, explicó que no hay un plazo de tiempo para que se nombre un sucesor, mientras queda vacante la sede hay dos alternativas; designar como delegado apostólico a un obispo de alguna diócesis vecina o al mismo Faustino Armendáriz, o que se nombre un delegado diocesano, elegido por medio del Colegio de Consultores.
“Hasta la misa del 21 de noviembre que será cuando quedará desligado de la Iglesia de Querétaro y mientras eso no suceda está en plenas funciones aunque ha sido nombrado para allá aún no toma posesión, la iglesia de Querétaro sigue trabajando normal, no hay menoscabo de nada, seguimos teniendo las reuniones que el derecho canónico nos permite”, indicó.
La Nunciatura Apostólica será la encargada de presentar una terna al santo padre para que elija al nuevo obispo de la diócesis de Querétaro, que desde Marciano Tinajero y Estrada no postula a un queretano al frente de la diócesis.
“Una vez que termine el periodo de la sede vacante, cuando el santo papa nombra a un sacerdote para Obispo titular hay dos posibilidades; que venga un obispo de cualquier parte de la República; o que sea un sacerdote que no es obispo aún y que sea nombrado”.
Lara Becerril aseguró que todos los proyectos pastorales y materiales seguirán en pie, por lo que una vez concluidos los festejos del año Jubilar Mariano, se enfocarán en la transición diocesana en Querétaro.
“Solo nos queda esperar que lleguen los tiempos y las circunstancias adecuadas, no hay candidatos, porque siempre al Santo Papa se le presenta una terna de candidatos para escoger uno, no hay terna aún, las cosas se empezarán a mover cuando quede la sede vacante, no hay tiempos, hay diócesis que se han quedado hasta un año sin Obispo titular”, finalizó.