Las decisiones que se tomen al interior de la Mesa Directiva, encabezada por la panista Verónica Hernández Flores, podrían no tener validez, al haber concluido su periodo el pasado cuatro de abril, afirmó la coordinadora de la bancada priista, Abigail Arredondo Ramos, quien a su vez, rechazó el cierre del Congreso, hasta el 30 de abril
Recientemente y ante la contingencia por el COVID-19, el Congreso local decidió cerrar sus instalaciones hasta el 30 de abril para evitar contagios.
Al respecto, Arredondo Ramos informó que la legisladora priista y vicepresidenta de la Mesa Directiva, Guadalupe Cárdenas Molina, manifestó su rechazo al acuerdo que autorizó el cierre de la Legislatura, por la falta de vigencia de la presidencia de este organismo.
“Si bien respetamos todas las medidas que se han tomado y que la autoridad ha dado para evitar un mayor número de propagación del virus, del contagio; al final, nosotros, creo que, no podemos parar. No podemos llegar a esta parálisis legislativa”, externó.
Arredondo Ramos recordó que, según la Ley Orgánica del Poder Legislativo, la Mesa Directiva tiene una duración de seis meses y, en un dictamen se estableció que la presidencia concluiría el cuatro de abril; por lo que advirtió, esta laguna jurídica podría generar que las decisiones de la Mesa no tengan validez.
“Podemos caer, precisamente, en que al rato, pueda esta laguna jurídica, generar que alguna de las decisiones que se tomen a través de esta mesa, no tengan validez, porque la ley es muy clara”, dijo.
Indicó en que también se presentó un escrito para que se realice un punto de acuerdo en la JUCOPO y pueda sesionar el Congreso.
De acuerdo con la Ley Orgánica del Poder Legislativo, la presidencia de la Legislatura conducirá los trabajos hasta por seis meses; no obstante, en cada caso se especificará la duración del ejercicio correspondiente.