A puerta cerrada, con pocos fieles y acompañados de un mariachi acudieron a cantar las mañanitas a la Virgen del Carmen en el templo ubicado en la calle de Morelos y Juárez que lució con el atrio lució vacío y con poco movimiento.
En punto de las 7 de la mañana empezaron a repicar las campanas del templo, entró un grupo de mariachis que entonaron las mañanitas y diversas melodías en honor a la virgen del Carmen.
Desde la entrada a los pocos que llegaron les aplicaron su gel antibacterial, hubo quien por descuido no llevaba cubrebocas, los organizadores le entregaban uno para que pudieran estar un momento en el templo.
Se extrañó el movimiento a las afueras del templo, la venta de antojitos y tamales a temprana hora, pan de fiesta y escapularios en honor a la virgen del Carmen.
Fray Antíoco Rodríguez Arriola, superior del templo reconoció la importancia de la Virgen del Carmen en la cultura mexicana y en general la herencia hispánica que promueve la fe y devoción para venerar sus milagros.
“Hoy queremos felicitarte, acompañarte y nosotros acurrucados como hijos en tu seno, queremos hacernos como todo tu pueblo que tú sabes está sufriendo, tu pueblo creciente, ancestral y hermoso, de paz, de bienestar y de unidad”, fue el mensaje de Fray Antíoco.
Aunque no se celebró misa, debido a las medidas que acordó la Diócesis de Querétaro por el Covid-19, la gente entró al templo y dejó arreglos florales y pasó a un lado de la virgen para felicitarla y darle gracias por su intercesión en este su día.