La Secretaría del Bienestar se encuentra supervisando las 349 escuelas intervenidas en Querétaro a través del programa “La Escuela es Nuestra”, donde se estima un beneficio a más de 12 mil 500 estudiantes de nivel básico.
Este programa federal busca mejorar las condiciones educativas de nivel básico en comunidades de alta y muy alta marginación.
El Delegado Estatal de Programas para el Desarrollo, Gilberto Herrera Ruiz, encabezó los recorridos de las escuelas que son beneficiadas por este programa para supervisar los avances que llevan las construcciones y mejoras que determinaron hacer los Comités Escolares de Administración Participativa.
Se recorrieron los municipios de Pinal de Amoles, San Joaquín, Tolimán, Cadereyta y Amealco y parte de la Sierra Gorda, donde se confirmó el trabajo que realizan los padres de familia y maestros en recibir y aplicar de manera directa la inversión federal y que las labores de mantenimiento, construcción y equipamiento en favor de los alumnos, corrieran también a su cargo y no a través de ningún otro nivel de gobierno.
“La inversión que se hace oscila entre 150 mil a 500 mil pesos por cada escuela, dependiendo de su matrícula. Los papás están asumiendo una gran responsabilidad porque están comprometidos con la educación de sus hijos. Ellos mismos han denunciado que anteriormente, si es que se hacía algo a las escuelas, esos trabajos se reportaban con precios que no se justiciaban, que eran evidentemente inflados”.
Destacó que el propósito principal de dignificar las condiciones en que estudian las niñas y niños de México, en este momento de contingencia sanitaria dicho programa también coadyuva a la economía de las comunidades, al fomentar el empleo de los papás y demás habitantes que llevan a cabo diversos trabajos de albañilería, herrería y carpintería, entre otros oficios.
El titular de la Delegación estatal de la Secretaría de Bienestar indicó que estas intervenciones se están llevando a cabo para atender a las comunidades escolares, sin importar si trabajan con el esquema Comisión Nacional de Fomento Educativo (CONAFE) o USEBEQ.
“Sin distingos estamos trabajando en todos los municipios, porque el rezago que se tiene en las comunidades es profundo y las escuelas se sitúan en esa realidad de desigualdad que condiciona el proceso de enseñanza-aprendizaje. Eso es justamente lo que queremos transformar, para que esta población pueda alcanzar mejores condiciones de vida”, finalizó.