“Todo cabe en un bolillo sabiéndolo acomodar”, reza el refrán. ¿O cómo es…? Y es que realmente todos tienen su propia manera y estilo para preparar una torta.
Los hay de todas las variedades: de frijol con queso, de jamón, milanesa, pierna y así casi de forma infinita. Pero aquí te señalamos las exóticas, menos pensadas o poco conocidas, pero siempre con la condición de que sean sabrosas.
La imaginación es el límite para preparar este alimento tan común y a la vista simple, pero en realidad complejo y muy competido, casi a la par de los tacos es el alimento que más variedad nos puede ofrecer.
DE TAMAL
La clásica herencia “chilanga” de la mañana y que es muy fácil encontrar en las esquinas, donde ante las tamaleras repletas de los tradicionales rojo de salsa y pollo, verde con rajas y carne de res y los de dulce es obligatorio ya es pedirlos en torta.
La preparación es de lo más sencillo: se corta el bolillo, se le quita el migajón y se pone el tamal de la preferencia. ¡Y a darle!.
Desde las 7:00 de la mañana la señora Susana se pone en la esquina de Pie de la Cuesta y Avenida Playa Roqueta lo que más vende son las tortas de tamal frito y tamal rojo, las cuales se le acaban desde las 9:00 o 10:00.
DE AGUACATE Y QUESO
Una opción para quienes no acostumbran comer carne, el queso panela es la alternativa, con aguacate y lechuga es de las opciones más nutritivas para desayunar, además el pan de ajonjolí complementa esta torta que es del gusto de mucha gente.
La señora María Bárcenas Miranda, lleva más de ocho años preparando tortas en el parque Industrial la Montaña, también vende las tradicionales de jamón y milanesa, pero en los últimos meses las de queso y aguacate han ganado gran popularidad.
DE TACOS
Parece una combinación antinatural: tortilla y bolillo en una misma combinación no suena bien, pero igual que con las de tamal todo cambia al primer bocado.
Ubicado en el acceso V del parque industrial en Epigmenio González, Gerardo Niembro asegura que prepara lo que piden los clientes, “yo en lo personal no le veo mucho futuro, pero la gente las empieza a pedir y hay que prepararlas como Dios manda”.
Además de un platillo interesante, la plática de un queretano de tradición complementa la experiencia de esta torta que va rellena de dos o tres tacos, perfectamente doblados y acompañados con su cebolla y limón “una torta no debe llevar mayonesa o algún aderezo, es tan sencilla como colocar el alimento adentro del pan”.
DE CHILAQUIL
Por los rumbos del Tec de Monterrey encontramos a la señora Patricia Yépez, quien en su caseta prepara las tortas de chilaquil.
Esta especialidad se sirve preferentemente por la mañana, se cree que la resaca impulsa el antojo de unos chilaquiles bien servidos, pero la novedad es que vienen en una telera.
“Tenemos ya 3 años con las tortas de chilaquiles, es lo que más se vende, si se acaba nos piden quesadillas, pero preparar la torta es muy fácil, su capa de frijoles, chilaquiles, crema, queso y la carne asada”.
DE CHILE RELLENO
En la ex fábrica de Hércules, donde están los populares puestos de tacos de a peso, en una pequeña mesa la señora Amalia Cabrera tiene más de 5 años con su modesto puesto de tortas.
La especialidad y que la gente más le pide son las de chile relleno, el cual extiende como una milanesa, la prepara con mayonesa, aguacate, chiles en vinagre y jitomate, la experiencia de sabor es diferente pero muy buena.
DE “BASURA”
Desde 1985 en la colonia Jardines de Querétaro tiene su local el famoso Chino, conocido así por los vecinos y gente que acude a comer sus famosos tacos y tortas de basura.
La receta de las tortas de basura la guarda celosamente como cualquier bien cocinero, pero llevan bistec, chorizo, carne adobada, cebolla, queso y su salsa, la preparación no es nada diferente, parte su telera, le pone la mayonesa y el relleno de la “basura” que tiene en la plancha preparando a la vista de cualquier comensal.
“La receta es el secreto, este es el original de la basura, si ven otros denúncienlos (risas) somos los primeros y la torta es de lo que la gente más pide”.