A todos los implicados en el llamado Caso Anaya, de supuesta triangulación de recursos, los distingue haber cursado secundaria y preparatoria en el Instituto San Javier, aunque con diferencia de algunos años.
Por ahí pasaron lo mismo el empresario Manuel Barreiro que su cuñado Alvaro Ugalde y el mejor amigo de éste, el candidato presidencial Ricardo Anaya y hasta su esposa Carolina, el arquitecto Juan Carlos Reyes García o el abogado demandante Daniel Rodríguez Velazco.
Otros apellidos de gran arraigo local, incluso exgobernadores y personajes ligados a la política y las finanzas o los hijos de éstos han pasado por esas aulas, como Calzada, Ortiz o Alcocer, Palacios y Guerra, entre otros.
El Instituto San Javier se describe a sí mismo con la misión de “formar buenos ciudadanos y cristianos” y así es que se convirtió en uno de los colegios más emblemáticos de la entidad.
El San Javier o informalmente “El Sanja” está en el corazón de la capital queretana, en la colonia del mismo nombre. De formación marista, abrió en 1942 con un sistema educativo integral basado en la formación de los niños y jóvenes en todas sus dimensiones, explicó el presbítero Prisciliano Hernández, quien fue confesor y profesor de sociología de 1978 a 1987.
“Para decirlo de modo concreto y coloquial, su paideia o sistema educativo mira a lo integral: formar buenos cristianos y buenos ciudadanos. Académicamente podríamos decir que asumen el humanismo cristiano para la formación de la persona en todas sus dimensiones; se puede sintetizar en capacitar para servir mejor”, refirió Hernández.
Según el presbítero desde su fundación el Instituto San Javier se destacó por contar con maestros competentes con un alto nivel académico que después emigraron a instituciones reconocidas como la Universidad Nacional Autónoma de México y quienes ofrecían el modelo educativo de la institución: “una síntesis teórica que parte del humanismo y toma elementos de cognoscitivismo y constructivismo, formando así buenos cristianos y ciudadanos capaces de aprender, hacer, ser y convivir”.
