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El 60% de las familias queretanas todavía son del tipo nuclear o “tradicional”, pero aumentan de manera significativa otros tipos de familia, como la monoparental, la homoparental y la reconstituida, entre otras y muchas de ellas ni siquiera contemplan tener hijos, por lo que se demandan nuevas campañas de respeto a la diversidad familiar.
Con motivo del Día Internacional de la Familia, diversas organizaciones se sumaron a la solicitud de tener mayor apertura y políticas públicas en favor de la diversidad de familias que se tienen en la entidad. Hoy se estima que cuatro de cada diez familias de Querétaro son diferentes a la nuclear y ese porcentaje va en aumento.
De acuerdo con cifras del INEGI de 2015, 70 de cada cien hogares en el país son nucleares, es decir, se conforma por papá, mamá e hijos, 28 son ampliados, lo que significa que se forman por un hogar nuclear y otros parientes, mientras que uno de esos cien es compuesto: se conforma por un hogar nuclear o ampliado y otras personas sin parentesco con quien encabece ese hogar.
Para el caso de Querétaro, el 72% de los hogares los dirigen hombres y el 28% los encabezan mujeres, pero la situación y condiciones de las familias del estado, viven un constante cambio por las diversas condiciones que se enfrentan.
Respecto a la cantidad de hijos por familia, no existe diferencias significativas entre un hogar nuclear y uno monoparental. Los primeros tienen 2.1 hijos en promedio y las monoparentales tienen 2.7 hijos en promedio en el estado.
HAY MÁS HOMBRES QUE DIRIGEN FAMILIAS MONOPARENTALES
En Querétaro la familia nuclear prevalece en el 60% de los hogares, admitió Cinthya Casarrubias, de la “Fundación Ool, Familias, Mujeres y Derechos Humanos”, quien también alertó que las familias monoparentales siguen en aumento, pero “con limbos jurídicos, políticos, económicos, sociales y hasta hace cinco años, de diez familias monoparentales, ocho eran lideradas por mujeres y dos por hombres, pero esta tendencia ya cambió”.
Resaltó que en las parejas de menos de 25 años, son los hombres los que se quedan con el hijo, porque las mujeres deciden que no querían una familia como proyecto de vida “y pactan, acuerda, que el padre sea quien críe, es un nuevo modelo monoparental reciente y así son cuatro de cada diez familias monoparentales”.
“Nos da una mirada de que necesitamos reestructurar nuestra forma de pensar, nuestra cultura respecto a Querétaro y esa actitud excluyente de que sólo mi familia es funcional”, agregó la activista.
Las familias monoparentales que quedan en manos de mujeres tienen características difíciles: son mujeres muy jóvenes, que tienen bajo nivel educativo y acceden a trabajos de poco ingreso.
QUIEREN ELIMINAR DISCRIMINACIÓN A FAMILIAS DIVERSAS
La organización “Vive México en Querétaro” inició la campaña “Todas las familias tienen derechos humanos”, a través de redes sociales, para prevenir y erradicar la discriminación, así como la violencia que afecta a las familias mexicanas.
“Desde el 2 de marzo estaremos enviando en redes sociales mensajes del respeto a los derechos humanos de la diversidad de familias que existe en la actualidad, así como el derecho que tienen a no ser discriminadas. Porque a partir de la reforma constitucional en materia de derechos humanos del año 2011 se reconoce a toda persona, así como a todo núcleo familiar con el mismo valor y la misma dignidad, sin importar el modelo de familia al que se pertenezca, por eso no puede haber negación de ningún derecho a una familia sobre otra”, dijo afirmó la organización.
UNIÓN LIBRE Y SIN HIJOS
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), el 58% de la población de 15 años y más se encuentra unida, ya sea casada o en unión libre. El 31.4 por ciento es soltera, frente al 10.5% que se encuentra separada, divorciada o viuda.
Una de las nuevas formas de familia son las parejas sin hijos. Paula y Carlos llevan siete años de casados y hasta la fecha no piensan tener hijos. A sus 40 años de edad, Paula afirma que tener hijos no forma parte de su proyecto de vida y tampoco es una prioridad para Carlos, que tiene 45.
“Al principio la gente, como ya te casas grande, te dice que luego luego hay que tener hijos, pero no es algo que nosotros visualizáramos, nos casamos para tener todo formal, arreglar papeles, pero no necesitamos hijos”, explica.
