Las comunidades de Galeras y Viborillas del municipio de Colón, fueron las más afectadas por la tromba y granizada registrada la noche del miércoles, donde aún hay cortes de energía eléctrica debido a la caída de postes y árboles en algunas viviendas.
Por más de 12 horas algunas calles estaban cubiertas por una capa de hasta 30 centímetros de granizo, a la orilla de la carretera estatal 100 y en la entrada a las comunidades de México Lindo, Galeras, La Ponderosa y sobre la estatal 200, donde varias bodegas sufrieron daños en su estructura y la caída de algunas bardas.
La mayor afectación fue en la comunidad de Galeras donde el arcotecho de la telesecundaria José Ma. Luis Mora y una bodega de enfrente colapsaron, personal de Protección Civil y de Riesgos de Colón acordonó la zona, mientras padres de familia se organizaron para realizar la limpieza y el retiro de ramas y hojas que dejó el granizo.
Elementos de Protección Civil municipal recorrieron las colonias y comunidades y de manera preliminar, reportaron daños en 15 viviendas, la mayoría de techo de lámina, donde se volaron y la caída de árboles.
Eduardo Lara, director de la Unidad Municipal de Protección Civil informó que la comunidad de Galeras es la más afectada, con daños en tajados por el peso del granizo y caída de por lo menos ocho árboles, a lo largo de la carretera y en las viviendas.
“Ayer aproximadamente a partir de las siete de la tarde recibimos el reporte de viviendas afectadas en la comunidad de Galeras y en la carretera 100, aproximadamente n el kilómetro 11, se registró una tromba acompañada de granizo, una acumulación de agua en algunas zonas de hasta 80 centímetros”.
El área de seguridad del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro reportó también la caída del portón de un hangar, vidrios rotos y un avión ligero que se volteó debido a las fuertes rachas de viento.
TESTIMONIOS DE VECINOS
Leonardo López, quien atiende un puesto de tortas a la orilla de la carretera estatal 200, en la comunidad de Galeras, explica que durante los más de 20 minutos que duró la tromba fueron suficientes para para toda movilización, los vehículos se orillaron y la gente se refugió en su pequeño local, que cerró las puertas para evitar el ingreso del agua.
Sandra Aguillón, vecina de la colonia El Zorrillo explicó que las fuertes rachas de aire partieron a la mitad del árbol de su casa, “estaba yo con mi familia cuando de repente se escuchó cómo tronó y cómo se vino abajo hacia las casas el árbol, los niños se espantaron pero estuvo feo”.