El obispo de la Diócesis de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, reconoció el esfuerzo de la administración municipal por crear un programa de atención a personas en situación de calle, donde beneficiará a 94 ciudadanos, pero dijo que hace falta atención a indigentes con problemas mentales para que sean atendidos de manera adecuada.
“Se tienen que atender las causas de la indigencia y revisar por qué hay indigentes con enfermedades mentales, qué espacios hay para estos hermanos indigentes con enfermedades mentales, no hay en Querétaro lamentablemente”.
Aunque no cuentan con una cifra, hay un gran porcentaje de personas en situación de calle con problemas mentales, que en caso de recibir la atención médica adecuada, podrían mejorar significativamente su calidad de vida.
El jerarca de la Iglesia Católica en Querétaro pidió a que este programa sea constante, ya que el mejorar las condiciones de vida de las personas requiere seguimiento oportuno.
Recordó que los diversos apoyos que brinda la Iglesia son en albergues para migrantes y comedores comunitarios como el de la Santa Clara, donde no cuentan con una estadística de gente que recibe el apoyo, pero siempre será adecuado sumar esfuerzos.
“Hay que tenderlos, nosotros no los contabilizamos, solamente los atendemos a los hermanos en calle y ojala sean programas que le den continuidad en las siguientes administraciones, porque siempre va a haber y siempre ha habido, y la iglesia preocupada por esto les da atención en la medida de sus posibilidades y no tenemos presupuesto”.