Con relación al número de suicidios en el estado, el obispo deQuerétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, consideró pertinentehacer un estudio a fondo que determine el problema del consumo dealcohol y drogas que podrían influir en esa decisión.
A pregunta expresa, el jerarca lamentó el creciente número depersonas que deciden quitarse la vida, acción en la que incurrentanto adolescentes como adultos.
“Es lamentable, yo creo que se tendrá que hacer un estudio afondo, por la autoridad competente, para mirar como ladistribución de alcohol, la distribución de droga y toda lapermisividad que hay en la sociedad propician todo esto, este es elsinsentido”.
Señaló que las acciones no eximirían a las familias decumplir con su responsabilidad, toda vez que los valores songenerados en ese núcleo social, de ahí que urgió a las familiasa que revisen el ambiente que en ellas se genera.
Advirtió que la incongruencia de los adultos es uno de loselementos que aleja a los jóvenes, al percatarse que “decimosuna cosa y hacemos otra”. Lo anterior en entrevista posterior ala ceremonia que ofició en catedral, en la que contó presencia degrupos de jóvenes laicos, quienes invitaron al obispo a participaren sus próximos festejos.
Sobre el tema, resaltó que es de suma importancia que lajuventud se sume y participe a las actividades de la Iglesia.
“Se acercan a Cristo más de tres mil jóvenes, no todosnecesariamente tendrán que ser sacerdotes, hay quienes se acercana Dios buscando vivir una vida que realmente valga la pena, lejosde vicios de drogas , de cualquier cosa que afecte su salud y suvida por eso, cuando el joven se siente tocado por la llamada deJesús es cuando decide entrar en este camino de formación, peroahorita fuimos testigos del entusiasmo de los jóvenes, de milesjóvenes en Querétaro que, afortunadamente, se acercan aDios”.
En este punto considera que varios se acercan luego de descubrirque los vacíos que ofrece el mundo no los ayudan a encontrarsentido a sus vidas. Por último y respecto a quienes se conviertenen sacerdotes, destacó que cada año se ordenan en la diócesis deQuerétaro entre 10 y 15 nuevos sacerdotes.