Con tres votos a favor, fueron aprobadas un par de reformas para visibilizar y prohibir el castigo corporal y humillante en el estado de Querétaro, iniciativa que fue propuesta por la diputada local Mariela Morán Ocampo.

Durante sesión de la comisión que preside, la diputada explicó que esta iniciativa nace a raíz del incremento en la violencia familiar que vivió durante la pandemia por Covid-19.

Morán Ocampo enfatizó que con esta aprobación se da un paso significativo para la prohibición de los castigos corporales y los castigos humillantes que vulneran la integridad física y emocional de los menores de edad.

“Su objeto es prohibir que quienes ejercen la patria potestad, custodia, tutela o guardia, o quienes tengan el cuidado de los menores ejerzan cualquier tipo de violencia en su contra en particular el castigo corporal y humillante”, indicó.

La legisladora indicó que, según las estadísticas, uno de cada tres menores que han sido violentados se convertirá en un violentador, por lo que enfatizó en la importancia de generar acciones de crianza positiva en las familias.

La propuesta contempla reformas al Código Civil y la Ley de Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes del estado.

La diputada insistió en la importancia de visibilizar el riesgo que corren las niñas, niños y adolescentes en manos de tutores y cuidadores, así como de padrastros, madrastras, familiares, maestros o entrenadores, quienes, a través de la violencia, se ven severamente afectados en distintos ámbitos.

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“Una huella profunda que se puede traducir en menor rendimiento escolar, menores habilidades para relacionarse con los demás, mayor predisposición a conductas sexuales irresponsables o al uso indebido de sustancias, trastornos crónicos de salud mental, pudiendo llegar hasta el suicidio”, apuntó.