El Tecnológico de Monterrey desarrolla proyecto multidisciplinario de rescate ambiental del río Querétaro, que de acuerdo a estudios de la Universidad Autónoma de Querétaro la contaminación que lo afecta principalmente se debe a la basura, descargas de desechos industriales, ganaderos y agrícolas, así como de aguas residuales producidas en las zonas urbanas.
En comunicado de prensa, el Instituto Tecnológico de Monterrey recordó que el río Querétaro nace en el municipio de Colón, y atraviesa comunidades de El Marqués, hasta la Cañada, recorre Querétaro, Corregidora y desemboca en Las Adjuntas.
Por ello, estudiantes y profesores de Arquitectura del Tec de Monterrey campus Querétaro, participarán en este proyecto a favor del medio ambriente; los docentes Diana García Cejudo y Rodrigo Pantoja Calderón, son los principales promotores de esta moción, cuyo objetivo será generar intervención arquitectónica.
Además, informó que integrantes del C+LAB y el socio formador del campus Querétaro, Reparadora Ecológica A.C., trabajan en conjunto en el Plan Regenerativo para el Río Querétaro.
Subrayó que C+LAB es una iniciativa nacional de la Escuela de Arquitectura, Arte y Diseño del Tec de Monterrey que reconoce el compromiso de las universidades frente a las necesidades de su entorno a través de la aplicación práctica del conocimiento.
Entre las acciones que propone el Tec -informaron los docentes- está definir estrategias de regeneración, recuperación, reactivación económica y social de la zona, así como el sustentar el sistema hídrico en armonía con el desarrollo humano.
Indicó que el proyecto multidisciplinario tiene una duración esperada de un año, en el que estarán participando igualmente 20 alumnos de la carrera de Arquitectura.
“Son únicamente alumnos de último semestre, ya que coincide con las últimas materias de su carrera, en la segunda fase del proyecto se hace una serie de equipos”, precisó Diana García.
Cabe destacar que la iniciativa cuenta con una primera fase de estrategia general donde se define el qué se tiene que hacer y los actores globales con quien deben alinearse para hacerla posible.
“De la mano de estudiantes y diferentes asesores llegamos a un plan de estrategias. Ese fue el primer cierre que se hizo este semestre”, comentó la profesora.
La siguiente etapa del proyecto contempla una serie de acciones específicas a realizar en el río, con el propósito de alcanzar una regeneración múltiple que aborda diferentes temáticas.
“La experiencia ha sido muy enriquecedora y llena de retos para nosotros y los alumnos quienes han encontrado en este proyecto no solo la posibilidad de aportar a su comunidad sino a su desarrollo profesional”, agregó.
