Vecinos de la tercera Privada del Río, ubicado en Santa María Magdalena, llevan meses viviendo entre olores fétidos y un río de aguas negras en su calle, un problema que han reportado sin recibir respuesta.
Afirman que ya acudieron a todas las instancias. “Hemos ido con el delegado, con el diputado de este distrito, Manuel Pozo, metimos escritos a la Comisión de Aguas, sin recibir respuesta; de nuestro dinero compramos unos tubos para el drenaje, pero nadie nos hace caso”, relató el vecino Arturo de Jesús.
Según ellos, el problema tiene varios meses. “El drenaje se tapó, dimos aviso y nadie acudió, por lo que por nuestros medios tratamos de desazolvar pero no lo conseguimos. Solo venían y no hacían nada. Esto ya tiene desde febrero”, explica Esperanza González.
La situación es alarmante, pues las aguas sucias que brotan todo el día y comienzan a mermar la salud de niños que salen a la calle a jugar, además de que ya han tenido algunos accidentes. “hace unos días una señora se resbaló, pues con la lluvia todo se enlodó y además del golpe quedó entre las aguas sucias”, señaló.
“Una niña también se cayó y se lastimó feo. Esperamos no llueva fuerte pues aquí se inunda y se nos metería esa suciedad a nuestras casas”, expresaron.
El agua que sale por una zanja y al parecer es por lo viejo del drenaje, recorre prácticamente todo el callejón y efectivamente el olor es insoportable, además de ser generadora de animales e insectos que pudieran ser un riesgo de transmisión de alguna enfermedad a los moradores del lugar.
La señora Esperanza comentó que no pueden ni comer de la peste, principalmente cuando el sol hace de las suyas.
“Es un cochinero de aguas negras que no sabe uno ni por dónde pasar”, expresó molesta.
Los vecinos exigen a la CEA hacer algo definitivo, pues esta fuga ha sido constante y cada día se hace más grande, siendo una verdadera problemática para quienes habitan y transitan diariamente por la Tercera Privada del Río.
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