La falta de inversión en el campo ha llevado a los propietarios de tierras a un proceso de comercialización, en su mayoría ilegal, de sus tierras en beneficio del crecimiento urbano que no tiene ningún rodamiento, afirmó Luis Rafael Hernández Palacios Mirón, Procurador Agrario.
Estimó que en México apenas se ha perdido un 2.5% del territorio agrario que ha pasado a formar parte del desarrollo urbano, por lo que revisarán estos procedimientos de otorgación de cambios de uso de suelo.
“Es importante tener en cuenta que la vocación de la tierra agraria no es en su totalidad para la producción de alimentos, solo el 65% de la totalidad de los 32,200 núcleos agrarios del país, tiene vocación agropecuaria”.
Destacó que el 80% de selvas y bosques del país están en ejidos y comunidades y el 70% del litoral marítimo terrestre colinda con ejidos y comunidades y tiene vocación acuícola, piscícola y turística.
El Procurador Agrario recordó que en Querétaro hay 360 núcleos agrarios, de los cuales son 346 ejidos, 14 comunidades y han tenido una consolidación productiva a pesar de las políticas neoliberales.
“En el caso de Querétaro el impacto de los cultivos es muy bajo, hay otras regiones del país en donde se ha venido sustrayendo tierra a los cultivos de alimentos y bienes básicos como Guerrero, Sinaloa y Michoacán”.