Entre Corregidora y Apaseo El Grande, más de 20 mil personas viven en el limbo. Compraron el sueño de vivir en Querétaro, pero administrativamente pertenecen al municipio guanajuatense, a pesar de estar más cerca de la jurisdicción queretana.
Se trata del fraccionamiento La Estancia, un complejo de decenas de privadas cuyos residentes mayoritariamente hacen sus vidas sociales, educativas y laborales en territorio queretano, en las que por la lejanía con Apaseo El Grande, los servicios por los que pagan no les son atendidos.
La Estancia se encuentra en Apaseo el Grande, pero solo unos metros lo dividen de Corregidora, Querétaro, de las primeras unidades habitacionales de este desarrollo, donde -según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI)- en 2020 vivían alrededor de 15 mil personas y hoy se estima que tiene más de 20 mil habitantes.
Es una de las comunidades con mayor crecimiento de Apaseo el Grande y representa más del 10 por ciento del total de su población.
Según Alan Velázquez, colono del fraccionamiento, en una emergencia hay “dos o tres patrullas que dan servicio”. Si la emergencia fuera de salud, podrían acudir a la clínica de La Norita, pero esta sólo brinda servicio por turnos que entregan en la mañana y las clínicas de Apaseo están a 40 minutos.
A mediados de 2023, su presidente municipal anunció la construcción de un centro de emergencias en la zona, donde concentrarían ambulancias, policía y bomberos. A meses de terminar 2024, únicamente hay un arcotecho y dos edificios en obra negra.
La mayoría de sus privadas no están entregadas al municipio y algunas tienen problemas con la administradora “Bienestar”.
De acuerdo con la vecina Vania Garduño, esta empresa tiene “abandonada a toda La Estancia”, lo que se puede confirmar a través de un documento proporcionado por la misma empresa, que asegura administrar 65 privadas y brindar servicios de vigilancia, jardinería, limpieza, mantenimiento, juntas vecinales, asambleas y eventos sociales. Pero sólo adjunta evidencias de poda en 45 privadas y evidencia de mantenimiento o vigilancia en una de ellas.
BARATO, PERO…
De acuerdo con información publicada en mayo por Diario de Querétaro, el precio promedio de la renta en Querétaro es de 10 mil 900 pesos y según el Índice de la Sociedad Hipotecaria Federal, el costo promedio de la vivienda es de 2.1 mdp. Lo que ha hecho de fraccionamientos como La Estancia opciones atractivas pues es posible encontrar departamentos y casas desde 630 mil pesos.
En cuanto a seguridad, en el último año han ocurrido al menos 8 asesinatos, y aunque no se tiene un alto registro de otro tipo de delitos del fuero común, a diario se observa a elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional (GN) pues la capacidad de reacción de la policía municipal es prácticamente nula.
Problemática que se acentúa con la falta de alumbrado público. Vecinos proporcionaron el oficio 1529 con fecha del 15 de diciembre de 2023, uno de los tantos con los que han solicitado al municipio la restauración de las luminarias en La Estancia. Hasta hoy no hay alumbrado público en media colonia.
Según los vecinos, en la colonia se registran hasta tres apagones por semana. El problema se agrava porque las antenas de telefonía celular y la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (CMAPA) no parecen contar con plantas de emergencia, por lo que, cuando falla la luz, se quedan también sin señal de teléfono y agua.
La distancia entre La Estancia y la cabecera de Apaseo el Grande es tan amplia, y la cercanía con Querétaro es tal, que el municipio al que oficialmente pertenecen los tiene en el olvido, así lo menciona el colono Alan Velázquez. Esto se hace evidente al observar el estado y funcionamiento de los servicios públicos.
De hecho, quien quiera llegar a Apaseo en autobús tendría que ir primero a la Terminal de Autobuses de Querétaro (TAQ) o pararse bajo el puente del Hospital General de Querétaro y la libre a Celaya, donde pasan las rutas hacia la cabecera municipal.
En cuanto al transporte de pasajeros para hacer su vida diaria no existe transporte hacia Apaseo u otros sitios de Guanajuato que circule en el fraccionamiento. Hay dos rutas: Una de La Estancia a la TAQ y una que va hacia Antea. Ambos servicios los provee Autotransportes Corregidora.
Según INEGI, en 2020 vivían en La Estancia al menos 4 mil menores de 14 años, pero solo hay un jardín de niños, una primaria y una secundaria que, de acuerdo con Coneval, brindan servicio a poco más de mil alumnos, lo que deja a la mayoría con la necesidad de ejercer su derecho a la educación en escuelas de Querétaro. Y ni hablar de la educación media superior.
¿Y LOS DESARROLLADORES?
En el fraccionamiento han operado al menos tres inmobiliarias: SiSol; GEO, que se declaró en bancarrota y abandonó el fraccionamiento para luego volver a construir bajo el nombre “Casas Ponty”.
Aunque casi todos los habitantes de La Estancia hacen su vida en nuestra entidad, el sueño de vivir en Querétaro es imposible pues un reordenamiento territorial implica más que las voluntades de dos municipios o estados. Mientras tanto siguen a la espera de que sus necesidades sean escuchadas y atendidas para sentir que su inversión no fue una mala decisión y mejorar su calidad de vida.
El problema puede agravarse si las autoridades siguen haciendo caso omiso a las necesidades de la comunidad y permitiendo que se construyan más fraccionamientos alejados de la cabecera municipal de Apaseo, pues los problemas por los servicios podrían extenderse rápidamente a desarrollos que venden la “vida en Querétaro” pero están en Apaseo, como Meseta, Los Cántaros, Fuentes de Balvanera o Villas del Rey, algunos de ellos considerados “premium”.