TEPEJI DEL RÍO, Hgo.- Suman ya 23 mil las peregrinas que integran la columna femenina rumbo al Tepeyac, quienes tras una caminata mañanera entraron al municipio de Tepeji del Río en el estado de Hidalgo, para escuchar la celebración litúrgica en la que 160 mujeres y su director espiritual recibieron su medalla conmemorativa por 25 y 50 años de peregrinar a la Basílica de Guadalupe.
Tras la larga caminata que realizaron las peregrinas desde las 4 de la mañana, fue en el campo de la cementera donde escucharon el mensaje que el asesor diocesano de la Pastoral Juvenil de la Diócesis de Querétaro, Efraín Isassi Cano ofreció, en el que las exhortó a analizar si su peregrinar ha servido para cambiar su vida.
“¿De qué te ha servido hermana peregrina venir cada año? Ojalá que sea para retomar fuerzas y llegar a la casa precisamente a vivir, a vivir como María echándole ganas a la vida, saliendo adelante en el diario vivir y reconociendo que tenemos errores pero también virtudes y cualidades. Felicidades señoras porque ustedes son las primeras a las que Jesús recibe con amor, ustedes son las cansadas y agobiadas”, refirió Isassi Cano.
Reconoció que al momento de caminar por la banda eléctrica que lleva a contemplar a la Virgen de Guadalupe en la Basílica, es cuando el cansancio y el agobio se olvida y pueden recobrar la fuerza necesaria para seguir adelante, ya que el corazón necesita recargarse a través del amor.
A este respecto, Isassi Cano pidió a cada peregrina ser ejemplo de vida para las y los jóvenes, ya que estos necesitan modelos a seguir y en la actualidad muchos de ellos no cuentan con eso. “Señoras sean testimonio de los jóvenes de ahora, porque necesitan eso y que a lo largo de esta peregrinación encuentren con Jesús un yugo de amor y sigan adelante en su vida”.
Recordando las palabras de Jesucristo “vengan a mí los que estén cansados y agobiados”, el responsable de la Pastoral Juvenil pidió a las peregrinas queretanas a acercarse a Jesús, escuchar su palabra y ser como él: manso y humilde pero sin llegar a ser menos.
“Señora sea mansa, no mensa, póngase las pilas en nombre de Jesús y María; no sean mensas sean mansas y dejen de resolverle la vida a sus hijos, porque la mansedumbre tiene que ver con el carácter, entonces pónganse las enaguas bien puestas, señoras cristianas católicas, bien apretadas para hacer las cosas bien”, aseveró el presbítero.
Tras concluir la ceremonia, fueron cinco peregrinas que recibieron sus medallas conmemorativas por 50 años de participar en la peregrinación: María Estrada Sánchez de El Nabo; Guadalupe Miranda de Vizarrón; Carmela Reséndiz Almaraz de La Valla; Inés García Arteaga del grupo de liturgia de Querétaro y Guillermina Jiménez Ramírez de Tequisquiapan; además del director espiritual de la romería femenina, Bernardo Reséndiz Vizcaya quien cumplió 25 años de participar en la peregrinación.