La venta de autopartes y refacciones en yonkes no se ha modificado por el contexto internacional de las armadoras de autos que disminuyeron su producción por falta de algunos componentes luego de la pandemia. Su negocio se basa en rescatar piezas o partes de automóviles siniestrados. Las aseguradoras de autos son su principal fuente de suministro, pero también adquieren automóviles de particulares que presentan fallas muy costosas de reparar.
El precio de un automóvil depende de la marca y modelo, así como de las condiciones mecánicas y estéticas ya que eso impactará en la ganancia de los propietarios de los yonkes.
Las personas que acuden a buscar piezas en estos negocios esperan encontrar mejores precios que en las agencias de autos, algunos otros son propietarios de automóviles más antiguos, cuyas refacciones son imposibles de encontrar en otro lugar.
“Estoy buscando la tapa de mi espejo porque me la robaron, pero en el yonke me quieren vender el espejo completo, quieren mil 500 por él, pero falta instalarlo y repintarlo. Pero en la agencia ya no lo encontré, mi carro es 2007”, dijo uno de las personas que visitó diversos negocios de este tipo.
Un espejo de un auto modelo 2015 se puede encontrar entre 2 mil y 2 mil 500 pesos; en la agencia, se puede llegar a cotizar por encima de los 6 mil pesos.
No hay un modelo en específico que tenga más demanda o una pieza en particular, pueden ser piezas estéticas como faros, rines e incluso motores enteros los que se pueden encontrar en estos lugares, depende de la disponibilidad y un poco de la suerte de cada comprador.
“Hay de todo, conforme van llegando los carros vamos viendo que piezas se pueden vender. Si no lo tenemos puede estar en algún otro yonke nos damos cuenta qué va llegando y qué carros van agarrando los demás”, comenta uno de los trabajadores.
Son enormes lugares con un mar de piezas, donde muchas veces el usuario explora un automóvil de su interés en busca de alguna parte que le sirva.
Se encuentran autos chocados de marcas de lujo, hasta algunos con más de 20 años de antigüedad, de los cuales siguen buscando piezas.
Algunos yonkes se especializan en piezas como motores. Un motor completo de un auto mediano de cuatro cilindros se puede encontrar entre 6 mil y 8 mil pesos. Otros se dedican únicamente a la venta de piezas de carrocería.