Reconocen ambientalistas labor de México con ballena gris

Redacción

  · jueves 16 de febrero de 2017

Gracias a labor de México se logró salvar a la ballena gris, especie marina que estaba a punto de extinguirse. Foto: Notimex

Gracias al esfuerzo y compromiso de la comunidad internacional,especialmente México, se logró salvar a la ballena gris, especiemarina que estaba a punto de extinguirse, destacó Omar Vidal,director de la fundación internacional ambientalista WorldWildlife Fund (WWF) en el país.

Refirió que costó 80 años de concientización y de luchacontra la caza desmedida de estos cetáceos evitar su explotacióncomercial, para lograr que el mundo recuperara a esta especie "quenació con el mundo" y que vive en nuestros mares.

“En el siglo pasado la ballena gris estuvo a punto deextinguirse, y la reducción fue por caza indiscriminada delcetáceo para la explotación comercial, había menos de cuatro milanimales”, mencionó el investigador y especialista en el tema dela ballena gris.

Resaltó que debido al compromiso de la comunidad internacional,en donde México jugó un papel muy importante, ya que alberga lossantuarios donde viene a reproducirse este mamífero marino, ahorase estima que hay en el mundo unos 25 mil ejemplares.

“Se paró la matanza, la cacería y la ballena está en unproceso franco de recuperación, actualmente está fuera delpeligro de extinción, se estima que hay alrededor de unos 25 milanimales. A mediados de 1950 se empezó a ver la disminución de lapoblación de ballena gris, por eso ha tomado unos 80 años, tomamucho tiempo recuperar las especies y es complicado”,comentó.

La ballena gris viaja entre ocho mil y 10 mil kilómetros cadaaño desde las costas de Alaska, pasa por Canadá, Estados Unidoshasta llegar a México, a las lagunas costeras de Ojo de Liebre,San Ignacio y Bahía Magdalena en Baja California Sur.

Esta migración representa una de las más grandes yespectaculares del mundo, empieza su viaje en el otoño y llega aMéxico en los primeros meses del año, entre febrero y marzoarriba a aguas mexicanas para reproducirse y tener a suscrías.

De acuerdo con el ambientalista se ha observado que debido alimpacto del Cambio Climático pueda haber alguna variación en lamigración de estos cetáceos, como ha ocurrido con otrasespecies.

Explicó si se cambian los patrones de temperaturas, losanimales pueden salir antes o después, para empezar la migracióny también pueden cambiar las fechas de regreso, lo que impacta dealguna manera a la población de ballenas.

Por ello el ambientalista internacional destacó la importanciade la participación de la sociedad para contrarrestar los efectosdel cambio climático, para lo cual reiteró que a nivel global sedeben disminuir las emisiones de bióxido de carbono, que ocasionanun aumento en la temperatura de la Tierra.

Asimismo, actuar para proteger a estas especies de otrasamenazas generadas por el turismo desorganizado, la contaminaciónen el mar.

“Entonces, aunque el cambio climático no lo podamos deteneren el mediano plazo, debido a estas emisiones que ya están en laatmosfera, sí podemos enfrentar y disminuir las amenazas que soninmediatas y causadas por el humano”.

En ese sentido informó que la WWF trabaja en México en laconservación de los bosques, en el tema de océanos -en loreferente a hábitat críticos-, en la promoción de áreasnaturales protegidas, y en cómo se puede producir alimentos.

“Buscamos cómo mejorar las técnicas y metodologíaspesqueras para que el pescador pueda mantener su vida y tengarecursos que le permita alimentarse, pero que se haga de una maneraresponsable, y en la agricultura y los alimentos, cómo podemosproducirlos sin que tengan una huella ecológica tan importantecomo la que se tiene ahora”.

Omar Vidal refirió que la principal problemática ambiental enMéxico para las especies y la biodiversidad, es la destrucción ymodificación del hábitat, ya sea por desarrollos turísticos nosustentables, por malas prácticas pesqueras, la tala inmoderada debosques y por contaminación.

“La modificación y destrucción del hábitat es lo que másimpacta no solamente a las especies, sino también los serviciosambientales y a la gente que depende de eso”, expuso.

Sin embargo, reconoció la participación de todos los sectoresen el país en los últimos años para revertir esta tendencia, conel fin de que la conservación beneficie a los ejidatarios, a loscampesinos, a los pescadores, a los propietarios de la tierra.

“Estamos viendo cada vez un mayor, compromiso, aunque faltamucho por hacer, pero tenemos esperanza que en los últimos añosesto siga aumentando”, concluyó.