Desde el año 2017 el Congreso de la Unión tenía la tarea de expedir una legislación única en materia procesal civil y familiar que fuera aplicable en todo el país, sin embargo, fue hasta el pasado mes de abril que se aprobó por parte del poder legislativo, pero ¿qué implica esta nueva normativa para la ciudadanía? ¿por qué la importancia de su aprobación? ¿qué retos se presentarán?
El Código tiene como “principios procesales la oralidad, la igualdad procesal de las partes, el interés superior de la niñez, la perspectiva de género y la accesibilidad para grupos sociales en situación de vulnerabilidad, entre otros y se encuentra integrado por 1191 artículos comprendidos en diez libros, así como por 20 artículos transitorios.” De acuerdo a los transitorios de dicho instrumento legislativo, el Código entrará en vigor a más tardar el 1° de abril de 2027.
De acuerdo a lo anterior, los Congresos estatales deberán emitir y reformar dentro de sus facultades, la legislación necesaria para su implementación, además de implementar políticas públicas para capacitar al personal y adecuar sus instalaciones para lograr la debida aplicación de la nueva normativa. Los abogados, deberemos continuar desarrollando diversas competencias que nos permitan afrontarnos a los procesos que se regirán por este nuevo ordenamiento, el cual tiene como novedades, la implementación de la justicia en línea, lo que implica audiencias en línea y firmas electrónicas, además de aquellos aspectos que ya forman parte de nuestro día a día como es el juzgar con perspectiva de género y la atención a grupos vulnerables.
*Directora de Programa de la Carrera de Derecho. Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, Campus Querétaro