China prometió este martes a los países africanos que los ayudará a superar los impactos de Covid-19 y del calentamiento global, en tanto se abstiene de "imponer su voluntad en África", que a su vez tampoco tendrá injerencia en los asuntos chinos.
China y 53 países africanos, reunidos en el Foro de Cooperación Sino-Africana (FOCAC) en las afueras de Dakar, en su declaración final instaron a "los países desarrollados (a demostrar) una mayor ambición" ante el cambio climático y apoyar a los países africanos en estos avances, dos semanas después de la COP26, en Glasgow.
La declaración reza en un pasaje: China y África. "ambas tienen derecho al desarrollo", haciendo referencia a la inquietud generalizada en África en cuanto a que éste sea sacrificado en aras de la lucha contra el calentamiento global.
Tres años después de la anterior reunión en Pekín, esta edición del FOCAC estuvo precedida de grandes expectativas por parte de las naciones africanas en relación al principal socio comercial del continente, en materia de apoyo al desarrollo, asistencia financiera e inversiones, o en aligerar la deuda y respuestas sanitarias.
Las economías africanas han sido afectadas muy severamente por la pandemia. Si bien aspiran a que China prosiga con sus principales proyectos en el continente, los líderes africanos quieren un comercio menos desequilibrado y una relación en este ámbito más rentable para ellos.
Con un espíritu cooperativo de "ganador-ganador", los funcionarios africanos y chinos pondrán mayor énfasis en la colaboración en sectores como los "de la salud pública, inversiones, comercio, industrialización, infraestructuras, agricultura y seguridad alimentaria, cambio climático, paz y seguridad", finaliza la declaración conjunta.