El sangriento tiroteo el martes contra manifestantes en Nigeria provocó conmoción en el país, donde Amnistía Internacional denuncia varios muertos, aunque las autoridades solo admiten un deceso.
El gobernador del estado de Lagos, Babajide Sanwo-Olu, reconoció en Twitter que hubo un muerto por el tiroteo contra manifestantes que desafiaron el toque de queda el martes por la noche en Lagos, capital económica de Nigeria.
La ONG Amnistía Internacional declaró a la AFP que varios manifestantes habían muerto el martes pero todavía intentaban "determinar la cifra exacta".
Las más de 1.000 personas que se habían concentrado el martes por la tarde en el peaje de Lekki en Lagos, fueron dispersados con disparos de munición real, después de que se decretara un toque de queda total para sofocar el movimiento de protesta que se expande desde hace más de diez días.
"Recae sobre mí la responsabilidad de este desgraciado incidente y voy a trabajar con el Gobierno Federal para dilucidar qué ocurrió", escribió el miércoles en Twitter, el gobernador del estado de Lagos, Sanwo-Olu, añadiendo que la represión "escapó a su control".
En los vídeos difundidos por las redes sociales se puede ver a hombres con uniforme militar disparando con armas de fuego, pero el ejército calificó las imágenes de "fake news".
Una periodista de AFP escuchó disparos cerca de este peaje durante la noche del martes y la mañana del miércoles, mientras los distritos de negocios de las islas de Lagos y todas las tiendas de esta ciudad de 20 millones de habitantes, permanecían cerrados.
"Martes sangriento", "martes negro" se podía leer este miércoles en las portadas de numerosos periódicos nigerianos y por las redes sociales, donde se han multiplicado las peticiones de dimisión del presidente Muhammadu Buharim, alentadas por la estrella de la música nigeriana, Davido
Joe Biden y Rihanna
El martes la policía anunció el despliegue inmediato en todo el país de su unidad antidisturbios como respuesta a los enfrentamientos que se vivían en varias manifestaciones.
El miércoles por la mañana la indignación se apoderaba de las redes, saltando más allá de las fronteras nigerianas.
El candidato presidencial en Estados Unidos, Joe Biden, pidió "al presidente Buhari y a los militares que cesen la violenta represión que ha costado la vida a varios manifestantes", dejó escrito en su página web.
"Estados Unidos tiene que situarse al lado de los nigerianos que se manifiestan pacificamente para que se reforme la policía y el fin de la corrupción en su democracia", añadió.
"No soporto ver la tortura y la brutalidad que viven todavía nuestros países", escribió por Twitter la cantante estadounidense Rihanna.
Esta inédita movilización en Nigeria nació a principios de octubre en las redes sociales como denuncia de la violencia policial y, poco a poco, se convirtió en una protesta contra el poder y el mal gobierno.
Desde que empezaron las protestas, al menos 18 personas, de las cuales dos policías, han muerto durante las manifestaciones.