Varias ciudades de Francia fueron teatro este domingo de manifestaciones, de algunos cientos de personas en su mayoría, contra el pasaporte de vacunación anticovid que entra en vigor el lunes en el país.
En París, tras una protesta matutina del movimiento de los chalecos amarillos -nacido a finales de 2018-, la formación de ultraderecha Los Patriotas movilizó a los oponentes a la obligación del pase de vacunación, que implicará, según ellos, un régimen de "apartheid" entre personas vacunadas y no vacunadas contra el covid-19.
Los manifestantes, sin mascarilla en su mayoría, portaban pancartas con lemas como "Libertad", "Verdad" o "No al apartheid", así como banderas francesas, constató una periodista de la AFP.
Sophie, una jurista de 44 años, y Franck, un consultor informático de 56 años, explicaron a la AFP que ambos se habían vacunado pero que no habían querido vacunar a su hija, porque se oponen a la inmunización contra el covid de niños y adolescentes.
Sophie lamentó que "justo cuando el virus es menos virulento, se pone en marcha el pase de vacunación, pese a que se podría apostar por la inmunidad natural colectiva".
En otras ciudades también se celebraron protestas, como en las localidades meridionales de Aix en Provence (700 asistentes, según la policía), Montpellier (950), Marsella (1.200) o Burdeos (450). En Lille (norte) se manifestaron 300 personas, según la policía, y en Estrasburgo (este), 600.
A partir del lunes, los mayores de 16 años deberán justificar que tienen la pauta de vacunación completa contra el covid-19 para poder entrar en restaurantes, bares, ferias y otros centros de ocio o para utilizar el transporte público interregional. Hasta ahora, los no vacunados podían presentar un test negativo reciente al covid-19, pero esto solo servirá a partir del lunes para acceder a los establecimientos sanitarios.
En Francia, más del 75% de la población está completamente vacunada.