Estados Unidos comprará y distribuirá en los países con menos recursos 500 millones de dosis suplementarias de la vacuna Pfizer contra el covid-19, indicaron este miércoles altos funcionarios de la administración estadounidense.
De esta manera, se elevará a más de 1.100 millones el número total de dosis que Washington promete donar.
Por otra parte, el presidente estadounidense Joe Biden quiere establecer un "objetivo ambicioso", por el cual cada país, incluyendo los más pobres, "alcance el 70% de vacunaciones" en su población dentro de un año, precisaron esas fuentes, bajo anonimato.
El mandatario demócrata deberá hacer el anuncio el miércoles durante una cumbre virtual que presidirá sobre la lucha contra la pandemia.
"Es un compromiso inmenso de Estados Unidos. Por cada dosis que administramos en este país hasta ahora, estamos donando tres dosis a otros países", dijo una funcionaria.
Las vacunas serán compradas a precio de costo y distribuidas mediante el mecanismo internacional Covax, según los responsables.
Hasta la fecha Estados Unidos ha donado unas 160 millones de dosis a más de 100 países diferentes.
La cumbre del miércoles debe reunir, de manera virtual, a funcionarios de más de 100 países, según las fuentes estadounidenses, que no dieron detalles sobre la identidad de los participantes.
En la cita, Biden debe presentar su objetivo de que cada país, incluidos los más pobres, alcance el 70% de su población vacunada, antes de la próxima Asamblea General de la ONU, es decir en un año.
Según OurWorldInData, 43,5% de la población mundial ha recibido al menos una dosis de vacuna.
Dos por ciento
Pero esa cifra, tirada hacia arriba por el ritmo de vacunación en los países desarrollados, esconde inmensas desigualdades y hay países con menos recursos donde solo un 2% de la población ha recibido al menos una dosis de la vacuna.
"Esta cumbre tiene como ambición decretar el inicio del fin de la pandemia", según las fuentes estadounidenses. "Eso va a requerir mucho trabajo".
La pandemia del coronavirus ha dejado más de 4,7 millones de muertos en el mundo desde finales de diciembre de 2019, según un conteo de la AFP basado en cifras oficiales.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud estima que si se tiene en cuenta la sobremortalidad directa e indirectamente vinculada al covid-19, el balance de la pandemia podría ser dos a tres veces más elevado.
La OMS no cesa de exhortar a los países ricos a distribuir vacunas a las poblaciones vulnerables en los países más pobres, en vez de suministrar dosis de refuerzo ("boosters") a sus propios ciudadanos, algo que contempla el gobierno de Biden.
El mandatario demócrata, que repite que "Estados Unidos está de regreso" bajo su batuta, pretende que la primera potencia lidere la lucha internacional contra la pandemia.
Pero debe combatir las reticencias, a veces agresivas, a la vacunación entre sus propios ciudadanos.
El covid-19 ha provocado más muertes de estadounidenses que la gripe española en 1918 y 1919, según los datos publicados el lunes por la universidad Johns Hopkins, referencia en la materia.
Más de 678.000 personas infectadas con el nuevo coronavirus han muerto en Estados Unidos, según ese balance.