El presidente estadounidense Joe Biden envió este miércoles a Taiwán una delegación no oficial de ex altos cargos estadounidenses para brindar apoyo a la isla, que se enfrenta a acciones cada vez más agresivas por parte de Pekín.
El exsenador Christopher Dodd y los ex subsecretarios de Estado Richard Armitage y James Steinberg aterrizaron por la tarde en el aeropuerto de la capital Taipei, según imágenes retransmitidas por la televisión.
Los enviados tienen previsto entrevistarse el jueves con la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen.
"Una vez más, esta visita demuestra la relación sólida entre Taiwán y Estados Unidos", declaró Xavier Chang, portavoz de la oficina de la presidencia. "Es tan sólida como una roca", dijo.
La decisión estadounidense fue duramente criticada por China, que considera a Taiwán como una provincia rebelde llamada a volver algún día bajo su control, si fuera necesario por la fuerza.
"China protestó ante Estados Unidos por el envío de responsables de visita a Taiwán," dijo a la prensa el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian.
Pekín ejerce una creciente presión económica, diplomática y militar sobre las autoridades taiwanesas en un intento por mantener a la isla aislada a nivel internacional y se enfada cuando los países envían delegaciones o mantienen contactos con Taipéi.
El año pasado los aviones militares chinos realizaron un número récord de incursiones en la zona de defensa de Taiwán.