Los principales jefes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia enfrentan órdenes de captura para que respondan por delitos graves tras el atentado contra una estación de policía la semana pasada, que causó 21 muertos y más de 60 heridos.
Las órdenes de captura contra toda la cúpula de la guerrilla del ELN fueron emitidas este sábado por varios jueces, a petición de la Fiscalía, para que respondan por delitos considerados infracciones al Derecho Internacional Humanitario (DIH) y graves violaciones a los derechos humanos.
Entre los jefes del ELN reclamados por las cortes colombianas figuran Nicolás Rodríguez Bautista, alias “Gabino”, máximo líder rebelde, y el negociador Israel Ramírez, alias “Pablo Beltrán”, quienes se encuentran en Cuba como parte de la delegación de paz del ELN en el diálogo que fue roto esta semana por Bogotá.
Otros miembros del Comando Central reclamados son Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía, alias “Pablito”, quien de acuerdo con fuentes oficiales estaría en Venezuela; Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, alias “Antonio García”; Rafael Sierra Granados, alias “Ramiro Vargas”; y Pedro Elías Cañas Serrano, alias “Óscar Santos”.
De acuerdo con autoridades colombianas, “Pablito” tendría nexos con el autor material del atentado, identificado como José Aldemar Rojas Rodríguez, quien falleció en el ataque, según las fuentes.
Tras el atentado, el presidente colombiano Iván Duque levantó la mesa de negociaciones con el ELN, exigió a Cuba la captura de los guerrilleros y declaró nulo el protocolo para el rompimiento del diálogo, que establece mecanismos para el retorno de los guerrilleros a Colombia en consulta con los países garantes.
Los negociadores del ELN pidieron el lunes pasado garantías para regresar a Colombia en unos 15 días, conforme el protocolo de ruptura de negociaciones suscrito por el Estado colombiano, el ELN y los países garantes del proceso de paz en 2016. El gobierno advirtió que desconocería dicho protocolo.
El atentado del pasado 17 de enero, el más cruento en los últimos años, fue realizado con un auto bomba contra una academia de la Policía en Bogotá, causando 21 muertos, entre ellos el responsable, y más de 60 heridos.