El Reino Unido elevó este martes de "sustancial" a "grave" el nivel de alerta ante una amenaza terrorista, tras los tiroteos en Viena y varios ataques en Francia.
El nivel de alerta, que estaba desde noviembre de 2019 en "sustancial", pasa ahora a "grave" -cuarto en una escala de cinco grados-, cuando un ataque terrorista es "muy probable", precisó el servicio de inteligencia MI5, al anunciar el cambio en su sitio de internet.
"Es una medida de precaución que no está basada en una amenaza en particular", indicó la ministra del Interior, Priti Patel.
Varios ataques considerados terroristas tuvieron lugar en los últimos meses en Reino Unido.
Un yihadista en libertad condicional asesinó a dos personas en noviembre de 2019 en el corazón de la capital británica, antes de ser abatido por la policía en el puente de London Bridge.
Tres personas también resultaron heridas en un ataque con cuchillo, de carácter islamista, en una calle comercial el pasado 2 de febrero.
El 20 de junio, otro ataque con cuchillo causó tres muertos en el parque de Reading, situado a unos 60 kilómetros al oeste de Londres.
La ministra del Interior explicó entonces que en los últimos tres años los servicios de seguridad evitaron 25 posibles atentados, ocho de ellos planeados por ultraderechistas, y se mostró preocupada por el peligro creciente de "actores aislados".