El número de víctimas en Turquía por el terremoto del pasado viernes ha subido a 114, mientras continúa la búsqueda de cuerpos en dos de los 17 edificios derruidos en Esmirna, la ciudad más golpeada por el sismo de magnitud 6,8.
Según los datos difundidos este miércoles por el servicio de emergencias turco AFAD, el número provisional de fallecidos es de 114, que, salvo dos, murieron atrapados en los inmuebles que se derrumbaron en un solo barrio de Esmirna, ciudad costera de cuatro millones de habitantes.
Las otras víctimas son una persona que sufrió un ataque al corazón y una mujer que falleció ahogada en Sigacik, municipio costero a 30 kilómetros al sur de Esmirna, anegado por un pequeño tsunami causado por el temblor, cuyo epicentro se localizaba en el mar Egeo .
Por otra parte, en la isla griega de Samos fallecieron dos adolescentes al derrumbarse un muro en una calle estrecha.
AFAD también ha contabilizado un millar de heridos, de los que 135 se hallan aún ingresados en el hospital, con menos de una decena en cuidados intensivos.
Varias miles de personas se han quedado sin hogar y se albergan en tiendas de campaña, porque aparte de los 17 inmuebles colapsados hay otros 107 que deberán ser derribados de inmediato al representar un peligro y 119 que han sufrido daños medios, según datos del Ministerio de Urbanismo.
La última persona rescatada de los escombros fue la pequeña Ayda Gezgin, de tres años, liberada en la mañana del martes en buen estado de salud tras permanecer 91 horas atrapada.