Las autoridades de Nepal elevaron hoy a 15 los muertos, entre ellos dos ciudadanos chinos y uno indio, y 24 los desaparecidos a causa de las inundaciones y corrimientos de tierra en Nepal, provocadas por las intensas lluvias del inicio de la temporada del monzón.
Según los últimos datos del ministerio del Interior nepalí, la mayor parte de la quincena de muertos se concentran en varias localidades del distrito de Sindhupalchok, ubicadas a unos 50 kilómetros al noreste de Katmandú.
Dos ciudadanos chinos y un indio se encontraban trabajando en un proyecto hídrico cuando fueron arrastrados por una repentina inundación, dijo a Efe el director adjunto del distrito de Sindhupalchok, Baburam Khanal.
"Veinte personas, incluyendo un ciudadano chino y dos indios se encuentran desaparecidas" en ese distrito, dijo Khanal, quien afirmó que las autoridades han puesto en marcha una operación de salvamento.
Al menos cien familias se han visto desplazadas por las fuertes lluvias asociadas al monzón, que suele afectar a Nepal desde comienzos de junio hasta finales de septiembre, debido al desbordamiento del río Melamchi.
Las autoridades creen que una serie de desprendimientos de tierra podrían estar detrás de la súbitas inundaciones. "Pero también sospechamos del desbordamiento de un lago glacial en una zona elevada fronteriza con el Tíbet", explicó Khanal.
Además de las inundaciones ocurridas en Sindhupalchok, las lluvias continuas de los últimos cuatro días han desplazado a unas 1.000 personas en el distrito montañoso de Manang.
Todos los años suelen perecer un centenar de personas debido a las lluvias del monzón en Nepal, que este año comenzó el pasado 12 de junio.
El año pasado la temporada fue especialmente devastadora, dejando unas 400 personas muertas, según el Portal de Reducción del Riesgo de Desastres de Nepal.
Nepal es muy vulnerable a los desastres naturales, y ocupa el cuarto lugar en términos de vulnerabilidad al cambio climático, según el informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Es además el undécimo país más frágil frente a los terremotos, y el trigésimo a las inundaciones, según el mismo informe.