Una avioneta particular fue asegurada por elementos de la Fiscalía General de la República, luego de un cateo en un hangar privado ubicado al interior del Aeropuerto Internacional de Querétaro (AIQ), por la investigación en curso sobre vuelos turísticos clandestinos que se detectaron desde el 2022 con destinos a Nuevo León y Tamaulipas.
Información emitida por parte de la Fiscalía General de la República a través de un comunicado, señaló que desde años atrás ya habían sido identificados varios vuelos que se realizaban alrededor de las 3 de la madrugada que aterrizaban en la ciudad de Tula, Tamaulipas y Cadereyta, Nuevo León, sin un registro legal tanto de despegue como de aterrizaje, además que tampoco se tenía el control de qué se transportaba y qué pasajeros iban a bordo, puesto que se trataba de varios hangares privados en diferentes estados así como diversas aeronaves pertenecientes a una posible empresa particular.
Por tal motivo, elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM) en su jurisdicción de la FGR Delegación Tamaulipas, iniciaron la carpeta de investigación desde el año 2022 tras detectar estos vuelos clandestinos en el Aeródromo de la Ciudad de Tula, perteneciente a la entidad tamaulipeca, sin embargo, al recabar datos de prueba durante casi 2 años, estos fueron mostrados a un juez de control federal quien autorizó la orden de cateo el pasado mes de marzo de este 2024 para intervenir el mencionado hangar, pero en el cumplimentación del mandato judicial, los tripulantes de una aeronave se percataron de dicho cateo y emprendieron el vuelo, el cual se le siguió el rastro hasta Querétaro.
Se trató de una avioneta Beechcraft King Air 200, con capacidad de 8 plazas y 2 lugares para los pilotos, con matrícula XB-IHK perteneciente a la empresa Grupo DRT que se localizó posteriormente en un hangar que también es propiedad de la referida empresa que se encuentra dentro del Aeropuerto Internacional de Querétaro situado en el municipio de Colón.
Una vez que se recabaron más datos de prueba en coordinación con los elementos de la Policía Federal Ministerial en Querétaro, también fueron presentados ante el juez federal, quien autorizó una nueva orden de cateo este mes de Abril, misma que se logró cumplimentar dentro del AIQ y en esta ocasión sí fue asegurada, pero no había ningún piloto o persona que se acreditara como propietario, por lo que el hangar quedó bajo resguardo para la investigación pertinente.
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Tanto dentro como fuera de la aeronave, se localizaron varios indicios que servirán como prueba para integrar los datos a la carpeta de investigación que aún se mantiene en curso para que se pueda dar con los representantes legales de esta empresa y se puedan justificar los vuelos realizados desde antes del 2022.