Choca contra el muro de contención en desincorporación de Bernardo Quintana

VÍCTOR GONZÁLEZ

  · sábado 21 de julio de 2018

Un fuerte accidente vehicular protagonizó el conductor de un Mustang, al impactarse contra el muro de contención de salida de carriles centrales a laterales en el bulevar Bernardo Quintana, en el Fraccionamiento Loma Dorada.

Este percance ocurrió de forma similar en el que perdió la vida una mujer de 58 años en el municipio de Corregidora la mañana de ayer viernes, pero en esta ocasión el conductor sobrevivió, aunque su estado es delicado.

En dirección sur a norte de la vialidad, se registró este incidente vial que involucró a un Ford Mustang, con placas de circulación UPC-815- A, para el estado de Querétaro.

Circulando a exceso de velocidad, el conductor del Mustang pretendió cambiar de carril de manera rápida, debido a esta situación ya no le alcanzó para moderar su velocidad y esquivar el muro de contención.

Por lo que maniobró para recibir el impacto sobre el lado del copiloto, y al menos poder salir con vida.

Otros automovilistas que circulaban por el lugar realizaron una llamada de emergencia a la Línea 9-1-1, para reportar el hecho de tránsito.

De manera inmediata unidades de la Cruz Roja, bomberos, así como de la policía estatal de Querétaro, se constituyeron en lugar de los hechos.

Los socorristas de la Cruz Roja, apoyados por bomberos, procedieron al rescate del conductor, el cual quedó atrapado dentro de los fieros torcidos del automóvil.

Mediante herramientas de corte lograron abrir la puerta del vehículo, para extraer al automovilista lesionado, quien presentaba diversas contusiones además de un traumatismo craneoencefálico.

Los paramédicos de la Cruz Roja, inmediatamente lo estabilizaron y lo subieron a una ambulancia para que fuese trasladado a un hospital.

Mientras que los elementos de la policía estatal abanderaron el lugar del percance y solicitaron la presencia de una grúa, para remolcar el vehículo a un corralón oficial.

Los integrantes del cuerpo de bomberos esparcieron tierra sobre los fluidos que salían del motor del vehículo, con el objeto de que otros automóviles no se patinaran al transitar por el lugar.