Un grupo de migrantes centroamericanos arribó ayer por la tarde al municipio de San Juan del Río, provenientes del norte del país, custodiados por elementos de la Policía Federal a las instalaciones de la Subdelegación de la Fiscalía General de la República (FGR), para ser puestos a disposición como parte del procedimiento para su deportación.

Su llegada a la ciudad provocó fuerte movilización de policías federales, pues por un momento se dijo que dentro del contingente de migrantes, que venía en un autobús, se suscitó un intento de revuelta, con la supuesta intención de escapar de las autoridades y evitar ser deportados.

La situación originó que a las inmediaciones de la FGR, en boulevard Hidalgo, arribaran decenas de patrullas y elementos de la Policía Federal, con la intención de garantizar que los migrantes se mantuvieran bajo el resguardo de la autoridad.

Al lugar también arribaron elementos de la Policía Municipal y Estatal, quienes lograron, en conjunto, mantener el orden y evitar la fuga de migrantes.

Se supo que los indocumentados permanecerían en San Juan hasta concluir el protocolo para continuar con su traslado hacia la capital del país.

Minutos después, hasta el lugar arribó personal del Instituto Nacional de Migración, que bajo un completo hermetismo realizó el trámite de protocolo para que dichas personas continuaran el traslado hasta su país.