Se registró un choque lateral en la carretera Libre a Celaya, en los límites de Guanajuato y Querétaro, el saldo de este percance fue de cuatro personas lesionadas, entre ellas dos menores de edad.

Los vehículos involucrados; la camioneta Renault Koleos, en color plata, con placas de circulación para el Estado de México, en la cual viajaba una mujer; así como un Volkswagen Jetta, tipo sedán, con matrícula UKA-157-Z para el estado de Querétaro, en la cual viajaba una madre y sus dos hijos pequeños.

Los hechos ocurrieron en el cruce con el camino que comunica a la comunidad de La Norita, en Apaseo El Alto, Guanajuato.

La conductora de del Jetta transitaba sobre el camino a La Norita, con la intención de cruzar la carretera Libre a Celaya en dirección hacia Querétaro, de manera confiada, cruzó un retorno esperando tomar el carril de alta de la vía, pero no se percató que a toda velocidad se aproximaba la camioneta Koleos, el impacto se dio de manera inevitable, por más que la conductora de este último vehículo intentó frenar o evadir al Volkswagen.

Debido a la colisión, el Jetta salió proyectado hacia el acotamiento,. la fuerza del impacto desprendió el motor y selló las puerta de este vehículo,, dejando atrapados a los tripulantes, mientras que las bosas de seguridad se activaron en la camioneta Renault.

Los automovilistas que circulaban en ambos cuerpos de la Querétaro Celaya reportaron lo ocurrido a los servicios de emergencias de ambos estados, durante varios minutos no hubo respuesta, por lo que algunos intentaron auxiliar a los lesionados, la conductora de la Koleos fue bajada del vehículo y antendida en el pavimento.

Tras el percance, los tripulantes del automóvil tipo sedán, una mujer embarazada y su hija de seis años quedaron inconscientes y policontundidas, mientras que un niño de nueve años resultó con fractura del brazo derecho, todos quedaron atrapados al interior del Jetta, entre los fierros retorcidos.

Después de media hora arribaron al lugar emergencistas de Protección Civil de Apaseo El Alto, sus colegas del Municipio de Corregidora, paramédicos del Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM) y diversos cuerpos de rescate privados.

Debido a que las puertas del Jetta quedaron atascadas, se requirió el uso de las llamadas “quijadas de la vida” para cortarlas y liberar a los ocupantes del Volkswagen.

Oficiales de la policía federal tomaron conocimiento del percance y apoyaron en las tareas de resguardo para esperar a que las grúas remolcaran a las unidades siniestradas a un corralón oficial.

La conductora lesionada de la camioneta fue enviada junto con los tres heridos del Jetta al Hospital del Niño y la Mujer en Querétaro para su atención.