Los trabajadores del Centro de Prevención Social (Cipres) IV de Santa María Magdalena se preparaban como cada viernes para asistir a laborar.
Pero al intentar ingresar a las instalaciones, se dieron cuenta que el policía encargado de relevar al guardia que cuida las instalaciones de madrugada, no les abría las puertas ni contestaba sus llamados.
Al acercarse a la caseta para indagar lo que pasaba, encontraron que el guardia se encontraba tirado en el piso de la caseta de vigilancia, al parecer inconsciente.
Debido a que le hablaban y no respondía las personas que intentaban ingresar al Cipres IV llamaron a la Policía.
Al llegar al lugar, los elementos policiales apoyados por la administración del Cipres, lograron entrar al interior de la caseta, logrando confirmar el cruento hallazgo.
Al intentar despertarlo, los policías examinaron que el cuerpo del vigilante ya no contaba con pulso ni respiración, solicitando el apoyo de los cuerpos de emergencias para que confirmaran el deceso.
Los paramédicos revisaron a la persona pero solamente confirmaron lo encontrado por los elementos policiales, que el guardia de la caseta de vigilancia había muerto.
De acuerdo con información emitida por la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Querétaro (SSPMQ) se trataba de un elemento adscrito a esta corporación, quién se encontraba bajo tratamiento médico, debido a que sufría crisis convulsivas, por lo que no efectuaba trabajo operativo.
Tras acordonar el sitio se informó a la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar inicio con las investigaciones, y mediante la necropsia de ley se determine el motivo del fallecimiento.
Asimismo se indicó que el municipio de Querétaro y la dependencia brindarán todo el apoyo y acompañamiento necesario a la familia del policía.
Según sus propios compañeros de la Policía Municipal, el oficial fallecido era conocido como "El Rolas", oficial de la Policía Municipal de Querétaro, que estaba de guardia en el tercer turno, encargado de la vigilancia al Cipres IV.