Un elemento de la Policía Estatal (PoEs), murió luego de realizar prácticas al interior de lo que se conoce como el Colegio de Policía (Centro de Capacitación, Formación e Investigación para la Seguridad del Estado de Querétaro).

Según se dijo se debió a que se sintió mal luego de las prácticas argumentando que fue porque dejó de tomar su medicamento para la diabetes que padecía desde hacía 10 años.

Con la autorización de la familia, fue trasladado al Hospital Siglo XXI por la madrugada vía terrestre aunque se pidió apoyo del helicóptero Conín, pero por qué no cuenta con instrumentos para volar de noche es que el traslado fue terrestre.

Se dijo que de manera obligatoria y permanente, los más de 4 mil policías que integran las corporaciones de seguridad en el estado, deben ser evaluados en materia de competencias, habilidades y conocimientos.

En lo que refiere al curso de las competencias básicas de la función policial, estas se realizan de forma periódica al personal operativo, por lo que el pasado 11 de mayo, un grupo de elementos asistió a dicho curso en el que al inicio de las prácticas físicas ninguno de los elementos manifestó presentar algún impedimento físico o de salud.

En el caso específico, el oficial tampoco manifestó ni exhibió ningún documento que evidenciara impedimento para el proceso de la práctica, motivo por el cual, al igual que el resto de los elementos policiales, dio inicio a las actividades físicas, en las instalaciones del Centro de Capacitación, Formación e Investigación para la Seguridad del Estado de Querétaro.

Por lo que una vez concluidas las prácticas, uno de los elementos manifestó sentirse mal, atribuyendo la causa de su malestar por la omisión de la toma del medicamento para controlar la enfermedad de diabetes que padecía desde hacía 10 años.

Debido al malestar que presentó el elemento policial, de inmediato se solicitaron los servicios de emergencias, quienes procedieron al traslado del policía al Instituto Mexicano del Seguro Social, para una valoración exhaustiva, donde se determinó con autorización de sus familiares realizar el traslado al Centro Médico Siglo XXI, en la Ciudad de México, para ser atendido por especialistas, lugar donde lamentablemente falleció.