Erika Yolanda "Q", la abogada de entre 45 y 50 años de edad que fue acribillada afuera de su domicilio en Vista Alegre tercera sección al sur de Querétaro el pasado 11 de Junio, recibió amenazas de muerte por supuestos fraudes al ejercer su profesión, pisó el CERESO femenil por 7 años, fue madre de tres hijas, pareja de un magistrado pensionado y con familia en la Guardia Nacional; habría forjado un camino de riesgo que presumiblemente la llevó a su muerte.
Testigos que proporcionaron datos a Diario de Querétaro, sobre la vida profesional y personal de Erika "Q", al tener una cercana relación, la describieron como una mujer que se supo abrir camino en la abogacía, sin embargo, la fama que obtuvo no fue de lo mejor, ya que varias personas se vieron afectados.
Uno de sus casos que la llevó al quiebre de su carrera, fue el haber engañado a uno de sus clientes, al haber cobrado alrededor de 300 mil pesos para sacarlo de la cárcel, sin embargo, al abandonar su caso, así como muchos otros más, fue demandada por fraude y al encontrarse culpable, pisó el CERESO femenil de San José El Alto por alrededor de 7 años hasta que logró salir.
Al seguir en el mundo del litigio, abordó más casos, de los cuales, solo realizó promesas, incluso, desde el CERESO varonil, quien fuera uno de sus clientes la habría amenazado con tomar venganza tras cumplir su condena, pero presumiblemente alguien más se le adelantó.
Quienes la conocieron, aseguraron que además de ejercer en un bufete de abogados en Querétaro, tenía negocios vinculados al robo de transporte de carga federal en la zona de San Juan del Río y los límites entre el Estado de México e Hidalgo, de donde también habría creado fortuna.
En su momento, llegó a quedar en banca rota, al grado de pedir préstamos a sus clientes para darles de comer a sus hijas mientras salía de la mala racha, quienes ya nunca volvieron a ver un solo peso.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
En los últimos días, antes de su muerte, se presume que fue estudiada en todos sus movimientos por alguno de sus ex clientes y que posteriormente llevó al despiadado asesinato que ocurrió frente a su hija la menor de tan solo 4 años.
Actualmente la Fiscalía sigue una línea de investigación referente a su círculo cercano, además de analizar las distintas grabaciones de las cámaras de videovigilancia que se encontraban en la calle Torrecillas, puesto que hasta el momento los dos hombres que fueron vistos por testigos, se podría tratar de asesinos a sueldo como los autores materiales, sin embargo, quedaría la pieza faltante, el autor intelectual y el móvil del asesinato.