Una visita a un cajero automático de Bancomer, le costó la vida a un hombre de la tercera edad, cuando de manera repentina le sobrevino un infarto.
Paramédicos lucharon por más de una hora para sacarlo del paro cardíaco, tras desvanecerse ya no volvió a despertar.
Fue en la sucursal bancaria en avenida Zaragoza, frente a la Comercial Mexicana.
Cerca del mediodía de este sábado, cuando el adulto mayor acudía a la sucursal en compañía de su hijo, de manera súbita le sobrevino un dolor en el pecho, el hombre perdió fuerza y cayó.
Los clientes del banco no podían dar crédito a la escena, muchos se encontraban asustados, mientras que el hombre poco a poco perdía el conocimiento.
Su hijo solicitó apoyo a los empleados del banco, quienes de manera inmediata al estar enlazados a líneas de emergencias a los cuerpos de seguridad, solicitaron la presencia de paramédicos para atenderlo.
Personal de emergencias llegó para brindar los primeros auxilios, tomaron la presión arterial del herido, checar su respiración, al encontrar debilitados a estos dos signos vitales, comenzaron las maniobras de reanimación.
Después de 40 minutos de iniciadas las labores de Reanimación Cardio-Pulmonar (RCP), y turnarse Técnicos en Urgencias Médicas (TUM), el hombre no reaccionaba, no volvía en sí, por lo que fue necesario aplicarle medidas avanzadas.
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Para esto, la gente que todavía se encontraba en el lugar fue desalojada, las puertas de vidrio a la entrada del banco fueron cerradas por el personal de seguridad para evitar la entrada de cuentahabientes, únicamente paramédicos y policías se les permitió la entrada y salida.
Tras desplegar maniobras avanzada de RCP, ni el pulso ni la respiración volvieron a la normalidad, y el hombre fue declarado muerto.
Elementos policiales de diversas corporaciones colocaron líneas de resguardo a la entrada del banco, con el propósito de preservar el sitio donde murió, y apoyar las labores de las autoridades ministeriales que arribaron tras confirmar el deceso.
Usuarios de los cajeros se disponían a entrar al banco, pero sólo encontraron las puertas cerradas y un letrero que indicaba el cierre temporal de la sucursal.
Algunos se acercaron a preguntarle a los policías que atendieron el porqué del cierre de la sucursal, pero únicamente se encontraron con la negativa de los elementos a informar del suceso.
