El gobierno de Guerrero y el Federal de la República llamó a la población civil y a organizaciones a no aventurarse a llevar víveres directamente al puerto de Acapulco, y pidieron que toda donación se haga a través de los cauces institucionales para que sean las fuerzas armadas quienes distribuyan el apoyo.
En Chilpancingo se habilitó la 35 zona militar como centro de acopio y distribución de víveres para que desde aquí se organice el traslado.
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La acción gubernamental coincidió con alertamientos que se han realizado en redes sociales para que quienes viajen a Acapulco tomen todas las previsiones posibles, pues se han detectado grupos de personas que al ver vehículos con ayuda, tratan de despojarlos de los víveres.
En el acceso de Acapulco se han instalado grupos militares y policiales para vigilar la carretera y ofrecer seguridad a quienes viajan hacia el puerto con ayuda, pese a que se ha hecho la recomendación a no ir pues puede resultar un riesgo para los viajeros.
Y es que la devastación en que se encuentra el puerto de Acapulco tras el paso del huracán Otis ha generado saqueos en todas las tiendas departamentales y de autoservicio que existían en este lugar, con ello se agudizó la escasez de alimento, agua y enseres básicos, por ello la población busca satisfacer sus necesidades de cualquier forma posible.
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La tarde-noche de este viernes personal de la Secretaría de Marina inició la distribución de despensas en las áreas más dañadas, esto con resguardo de personal armado brindando seguridad a los camiones que llevaron el apoyo humanitario.
Publicado originalmente en El Sol de Acapulco